UN PROYECTO SIEMPRE DORMIDO
¿Cuál es el principal obstáculo para que la UE cree estructuras militares?
Las cuestiones de defensa y seguridad son competencia exclusiva de los países miembros y un elemento muy cercano al concepto de soberanía. Como tal está sujeto a la regla de la unanimidad, lo que significa que si todos los países no están de acuerdo, no es posible tomar ninguna decisión conjunta.
¿Por qué es un momento especial para intentar ponerlo en marcha?
Uno de los factores que ha entorpecido históricamente un avance de la UE en el campo de la defensa había sido el veto del Reino Unido. Una vez que Londres ha dejado la UE no significa que no haya reticencias por parte de otros países que consideran que este papel lo ejerce mejor la OTAN, pero carecen del peso específico que tenía el Reino Unido. Los sucesos de Afganistán han precipitado además el debate sobre este asunto.
¿Cómo puede funcionar esa Europa de la defensa?
El elemento central será el mecanismo conocido como «cooperación reforzada», que consiste en que los países pueden participar o no en determinado proyecto y el hecho de que ciertos gobiernos no quieran participar no impide que otros lo hagan y que se puedan apoyar en las instituciones comunitarias para ello. El objetivo será crear una unidad de intervención rápida que sea operativa.