Bagnaia alarga el Mundial
∑El piloto de Ducati logra su segundo triunfo consecutivo e impide que Quartararo pueda coronarse campeón en Austin
Tenía Fabio Quartararo el Mundial en el bolsillo hasta que despertó Francesco Bagnaia. Aunque el francés goza de una envidiable ventaja para suceder a Joan Mir como campeón, el piloto de Ducati le ha ido recortando puntos con dos victorias consecutivas que le impiden disponer de la posibilidad matemática de coronarse dentro de dos semanas en Austin. 48 puntos separan a ambos cuando faltan cuatro carreras (Las Américas, Misano, Algarve y Valencia) para que concluya el campeonato. Cien puntos que aún permiten soñar a Bagnaia y disfrutar a los aficionados del motor.
«La victoria en Aragón desbloqueó a Pecco. Es una pena que perdiera tantos puntos al principio de curso, pero el Mundial está aún abierto», asegura Valentino Rossi, a quien le quedan cuatro grandes premios antes de colgar el mono y poner fin a 26 años en el Mundial de MotoGP. Bagnaia, que se estreno en lo más alto del cajón en Motorland, repitió en Misano, liderando una carrera que dominó desde que el semáforo se apagó. Aprovechó la pole lograda el sábado y una excelente salida para sentar las bases de su segunda victoria en la categoría reina.
«Hice la mejor salida de mi vida, porque empecé de inmediato, en cuanto se apagó el semáforo, estuve entrenándolo mucho hasta clavar la salida, y lo he conseguido. Y cuando pasé la primera vuelta vi que ya tenía un segundo y pensé que era increíble, y traté de gestionar los neumáticos. En las últimas vueltas ha sido muy difícil porque Fabio iba recortando cuatro décimas por vuelta. Ha sido mas difícil ganar aquí que en Aragón», atinaba a resumir un emocionado Bagnaia, al que el triunfo puede costarle su relación de pareja. «Tras ganar en Motorland, llegué casa por la noche y vi la carrera cuatro veces seguidas. Mi novia se levantó de la cama y apareció muy enfadada porque eran las cuatro de la mañana, me había estado esperando y se sentía sola... Estuvo dos días sin hablarme», explicaba divertido en el ‘pit lane’ de Misano.
A falta de cuatro carreras, Bagnaia y Quartararo dirimirán un nuevo pulso en Austin, donde la velocidad de la Ducati puede volver a ser clave en un circuito que tiene una de las rectas más largas del Mundial, aunque si el francés realiza una buena carrera puede regresar a Misano dentro de un mes con muchas posibilidades de convertirse en campeón del mundo. Marc Márquez, que acabó cuarto, también realizo una buena salida: «Ha sido mucho mejor de lo esperado». El catalán sufrió dos caídas el sábado que hicieron temer por su maltrecho hombro, condicionaron su clasificación y le relegaron a la séptima plaza en la parrilla.
La cruz en Misano, más allá de la retirada de Jorge Martín o la caída de Rins, fue el sexto lugar de Joan Mir, que le deja a 67 puntos de Quartararo con 100 en juego, lo que da por concluido su opción de reeditar el título de campeón. «La primera plaza se nos ha ido ya. Me cuesta asumirlo, pero es así. Tengo la sensación de que este año no he dado todo lo que tengo dentro», lamentó el piloto de Suzuki.
Raúl Fernández, otra proeza
Segunda victoria consecutiva de Raúl Fernández en Moto2, que partía desde la pole. El piloto español aguantó toda la carrera con mucho dolor en la mano, de la que había sido operado. «Estoy reventado, no tengo más. Ha sido una carrera muy dura. No podía más con la mano», explicaba. Ya había ganado en las mismas condiciones en Aragón la semana pasada, pero aseguraba que ahora las molestias eran insoportables. No se lo puso fácil Remy Gardner, líder de la categoría, que parecía que no iba a subir al podio pero que en las dos últimas vueltas presionó al piloto de KTM. El australiano vio recortada la distancia con el Tiburón de Mazarrón en el campeonato en cinco puntos. Ahora mismo, a falta de cuatro carreras, solo 34 puntos separan al australiano de Raúl Fernández. En Moto3 ganó Foggia, que le recortó puntos al líder, Pedro Acosta.