El FMI desbarata las previsiones del Gobierno para este año y 2022
▶ El organismo se alinea con el INE y sitúa el alza del PIB en casi un punto menos de la previsión de Sánchez ▶ Su última monitorización cuestiona todo el cuadro macroeconómico del Ejecutivo para los Presupuestos
El FMI ha enfriado todas las proyecciones macroeconómicas del Gobierno tan solo un día antes de la presentación de los Presupuestos Generales del Estado del próximo año al Congreso. El Ejecutivo ya esperaba este correctivo, después del aviso del INE (rebajó en 1,7 puntos el crecimiento del PIB en el segundo trimestre, hasta el 1,1%), al que intentó desacreditar tras rebajar el crecimiento del PIB en el segundo trimestre. Ahora, el ajuste llega desde gran organismo económico internacional, que no solo recorta la previsión de crecimiento económico para este año, sino que también pone en entredicho las previsiones de déficit, deuda y desempleo que el Ejecutivo ha plasmado de cara a la elaboración de las cuentas públicas de 2022.
De esta forma, el FMI se alinea con el INE y recorta medio punto su previsión de crecimiento para el PIB español en el presente año hasta el 5,7%. Son 0,8 puntos menos que las previsiones del Gobierno, que considera que las previsiones de Estadística no eran coherentes con su indicadores y por eso mantiene el crecimiento de este año en el 6,5%. Las previsiones del FMI sitúan a nuestra economía en un avance por debajo de la media mundial (+5,9%), cuando en su anterior revisión publicada en el mes de julio, España se situaba por encima de esa línea con un alza del 6,2%.
Sin embargo, la última monitorización del Fondo Monetario Internacional a la economía española va más allá del hachazo al PIB. Porque también discute el resto de datos macroeconómicos avanzados en las cuentas públicas. En el apartado de la deuda, estima que crecerá hasta el 120,2% del PIB este año y disminuirá hasta el 116,4% en 2022. Las previsiones del Gobierno en este indicador son bastante más alentadoras y sitúan el pasivo en un 119,5% del PIB en 2021 y 115,1 el que viene. Cerca de un punto menos este año y 1,3 el que viene.
Otra previsión en la que no coinciden Gobierno y FMI es en el déficit de las cuentas públicas este año. Así, la organización que lidera Kristalina Georgieva, reafirmada ayer como presidenta tras ser acusada de favorecer a China, sitúa el desfase público en el -8,6%, 0,2 puntos más del señalado por el Ejecutivo. En el único dato en el que coinciden ambos es en el déficit de 2022, para el que auguran un desajuste del 5%.
Por último, la organización también pone en entredicho la tasa de desempleo proyectada por el Ejecutivo en los Presupuestos para 2021 y 2022. Así, el FMI sitúa en el 15,5% el desempleo para este año y el 14,8 para el siguiente.
En las cuentas públicas el Gobierno augura un 15,2% al cierre de este ejercicio y un 14,1 en 2022.
A pesar del hachazo, España seguirá siendo una de las grandes economías que más crecerá este año, un hecho que se daba por descontado tras ser la más castigada en 2020 por el Covid, donde el desplome fue del 10,8%. Sin embargo la recuperación no tendrá la misma fuerza que la prevista con el Gobierno. El Fondo sitúa a vecinos como Francia o Italia, cuyos retrocesos el pasado año fueron menos intensos, por encima. Este último con un alza del 6,3% en PIB, respecto al 5,8% que marcaba en su anterior informe en el mes de julio.
Así las cosas, el FMI también revisa al alza la economía de la Eurozona, que ya sitúa en un crecimiento del 5% a finales de año. En julio, la previsión era del 4,6%. A pesar de estos avances, la organización global alerta de que el impulso de recuperación mundial se está debilitando, «obstaculizado por la variante Delta» del Covid-19.
Muy diferente son las previsiones para España en 2022. El Fondo Monetario las ha revisado al alza y espera que el curso que viene España avance un 6,4%, un 0,6% más que en la última revisión realizada en julio. De esta manera, la economía española sería la que más crecería entre los países más avanzados, aunque crecería más de medio punto menos de lo trazado por el Gobierno en los Presupuestos.
Sin embargo, lejos de recibir con cautela el dato del FMI, el Gobierno saca pecho con él. «El FMI certifica que España liderará el crecimiento económico en 2022», afirmó ayer el secretario de Estado de Economía, Gonzalo García Andrés, en la red social Twitter. El socialista también resaltó que este avance supondrá «que España será el país más dinámico de la Unión Europea», ya que el organismo internacional estima un crecimiento del 4,9% para la economía mundial en 2022 y prevé que la zona euro crezca un 4,3%.
Peligro de inflación
En otro orden, el FMI continúa alertando sobre los peligros que acechan a nivel global la recuperación de la economía. Entre otras amenazas, avisa sobre la incidencia de la inflación (en España la sitúa en un 2,2% este año) que tiene en jaque a la cadena de suministro provocado por «unas interrupciones más prolongadas de lo esperado, lo que está alimentando la inflación en muchos países», señala el organismo.
«Las interrupciones del suministro plantean otro desafío político. Por un lado, brotes pandémicos y las alteraciones climáticas han provocado una escasez de insumos clave y han reducido actividad manufacturera en varios países. Por otro lado, esta escasez de oferta, junto con la liberación de la demanda reprimida y el repunte de los precios de las materias primas, han causado que la inflación de los precios al consumidor aumentara rápidamente en Estados Unidos, Alemania y muchas economías de mercados emergentes y en desarrollo», aclara el organismo.
En la organización internacional también preocupa la ralentización del crecimiento en las economías menos desarrolladas como consecuencia de la gran «brecha de vacunación» y las grandes disparidades en las políticas económicas de apoyo frente al Covid-19. «Si bien más del 60% de la población de las economías avanzadas está vacunados y algunos ahora están recibiendo inyecciones de refuerzo, alrededor del 96 por ciento de la población de los países de bajos ingresos sigue sin vacunarse» concluye el FMI.
El Fondo Monetario Internacional sitúa la deuda en el 120,2% del PIB, 0,7 puntos más de lo que vaticina La Moncloa
La organización que lidera Kristalina Georgieva certifica que no habrá rebaja del paro hasta el año próximo