El PSOE avala el movimiento de Otegi y pone en guardia al PNV
▶Ferraz celebra las palabras del líder proetarra como un «punto de inflexión», pese a que no pide perdón ▶El PNV se muestra más crítico para proteger sus intereses ante el relevo generacional del socialismo vasco
Dos frases y un diagnóstico. «Sentimos enormemente su sufrimiento y nos comprometemos a mitigarlo» (Arnaldo Otegi). «El futuro es un pacto con Bildu y Podemos para desalojar al PNV del poder desde la izquierda, aunque antes tienen que dar los pasos que aún le quedan en su condena de la violencia para que sea posible gobernar con ellos» (un miembro de la ejecutiva de los socialistas vascos). La interpretación: las palabras de ayer del líder proetarra son un paso más en la estrategia de sumar fuerzas en la izquierda para desalojar del poder a los nacionalistas.
En el País Vasco el futuro está más escrito de lo que parece. Diez años después de la rendición de ETA –de la de las armas– los movimientos comienzan a estar claros: el PSOE da por rehabilitado a Bildu –las últimas exigencias se solventan con pronunciamientos como el de ayer de Otegi– y ven su futuro en el País Vasco ligado a los herederos de la banda. Un escenario potencialmente explosivo para el PNV, que puede ver muy mermada su capacidad de influencia en Madrid.
El movimiento de Bildu anticipa profundos movimientos en el tablero político, no tanto a nivel nacional como sí en la política vasca. El PSOE ya ha venido normalizando a Bildu en los dos últimos años. Hasta las segundas elecciones generales de 2019 no había una relación normalizada entre los socialistas y EH Bildu. De aquel deshielo llegó el apoyo a la investidura de Pedro Sánchez en enero de 2019 y a los Presupuestos Generales del Estado de 2020. Es decir, la alianza parlamentaria ya existía y era previa al comunicado de ayer. Pero donde sí se abren nuevos horizontes es en la política vasca. Ayer el PSOE quiso que fuera el ex lendakari Patxi López y no su nuevo portavoz, Felipe Sicilia, el que solemnizase la postura del partido tras las palabras de Otegi.El PSOE no obvia que deben darse más pasos, pero confieren al mensaje de hoy una trascendencia absoluta: «Cuando uno sabe lo que cuesta dar un paso en ese mundo, pues valora este reconocimiento que era el que llevábamos años reclamando los demócratas», dijo López, que quiso poner en valor que «hoy la izquierda abertzale reconoce por primera vez públicamente a las víctimas de ETA». Además, el PSOE interpreta que en la izquierda abertzale «provocarán más avances» porque «hay heridas que ellos pueden ayudar a que cicatricen».
En conversación con ABC, un importante presidente autonómico, corrobora: «Hay relato para su mundo, pero el punto tres, el relato del reconocimiento del daño causado es algo que les veníamos pidiendo. Es un paso, pero faltan muchos más». En este punto, el portavoz Felipe Sicilia señaló que la posición de los socialistas sobre los ‘Ongi Etorri’ es que no se deberían producir. Mientras que López planteaba que « hay cosas que ellos pueden evitar hacer para que sigan abiertas esas heridas». Los socialistas interpretan el comunicado como «un punto de inflexión» frente al que se produjo hace tres años y que Patxi López definió como «detestable» por hablar de victimas colaterales. El exlendakari ha interpretado que en la declaración leída por Arnaldo Otegi «hay una especie de enmienda a su papel en el pasado como sostenedor de quien provocaba esa violencia».
Los socialistas no ven todavía el terreno fértil para plantear esa alianza. Pero el socialismo vasco está en fase de renovación. La líder durante estos últimos años, Iodia Mendia, no se presenta a la reelección. Ella era el rostro de los últimos gobiernos de coalición con el PNV. Su puesto lo asumirá Eneko Andueza, portavoz parlamentario y líder del partido en Gipuzkoa.
Tanto los socialistas vascos como el PNV siempre se han referido a la ne
Arnaldo Otegi
Coordinador general de Bildu «Sentimos su sufrimiento y nos comprometemos a mitigarlo»
cesidad de que EH Bildu transitase una travesía de normalización en la que debían superar diferentes hitos morales. Hasta que no sucediese Bildu era un partido con el que no se podía compartir un gobierno con ellos. Y esa ha sido la consideración común que ha recuperado la alianza entre ambos en los últimos años como el pacto natural en las principales instituciones vascas.
El mensaje que transmiten los socialistas es que todavía no toca. El relevo controlado en el liderazgo del socialismo vasco lo pone de manifiesto. Pero pese a que Andueza es la persona a la que Ferraz ha dado el visto bueno, éste aseguró en la presentación de su candidatura que su intención era «ensanchar el espacio de la izquierda vasca» y defendió un partido «sin ataduras» a la hora de pactar, aunque tuvo que añadir que siempre «desde la lealtad al PNV» y a los acuerdos vigentes. Además, aunque Andueza es el seguro nuevo líder, va a haber primarias. Porque la exedil en Basauri Soraya Morla ha reunido los avales suficientes. Y aunque ella hasta ahora también ha criticado a Bildu por no haber condenado a ETA, ha sido más explícita a la hora de abrir la puerta a una coalición de izquierdas con Bildu y Podemos. Porque considera que el pacto con el PNV conduce al letargo al PSE.
El reconocimiento de lo sucedido ayer como un paso trascendental contribuye a desbrozar ese camino. Que en el socialismo vasco no hay duda de que a medio plazo se abrirá en el horizonte. Y esa certeza es la que provocó una respuesta mucho más dura que la de los socialistas por parte del PNV. En un comunicado se referían al planteamiento como «corto e insuficiente más aún si tenemos en cuenta que ha tenido diez años para darlo».