Alergia a lo privado
Si los que menos ganan no pueden ahorrar, que no ahorre nadie, esa es la filosofía del Gobierno
EL Ministerio de Seguridad Social está diseñando el prometido superfondo de pensiones para que los autónomos y las pequeñas empresas que no puedan tener planes de empleo, puedan depositar el ahorro para su jubilación y la de sus empleados en este instrumento. Hasta ahí nada que objetar. Podemos debatir sobre los detalles del fondo. Nos puede gustar más o menos que se pretenda dejar en manos del Gobierno y de los agentes sociales el control de este instrumento. Nos puede preocupar que la estrategia de inversión sea demasiado rígida y no sea capaz de adaptarse y reaccionar ante los vaivenes del mercado; podemos mostrar reparos a que se politicen hasta las inversiones, pero lo realmente grave es que mientras se desarrolla este nuevo instrumento de ahorro, se ha asestado una puñalada de muerte a los actuales planes de pensiones individuales; no se hace nada para incentivar los planes de empleo en las empresas privadas y ni siquiera se han recuperado las aportaciones de la Administración por los empleados públicos, suspendidas en 2012.
El ministro del ramo, José Luis Escrivá, argumenta que el actual sistema privado de ahorro para la jubilación es regresivo, porque desgravan más los que tienen rentas más altas. Y con esta excusa ha rebajado en tan solo dos años el límite de aportaciones individuales de los 8.000 euros anuales a los 1.500. Se le olvida al ministro, que los que tienen rentas más altas también serán los que más paguen cuando rescaten sus planes de pensiones. Por tanto, solo se me ocurre una razón que justifique este estrangulamiento de los planes privados▶ la ideología, la alergia de este Gobierno a todo lo que huela a privado. Y lo entendería si la Seguridad Social estuviera en manos de Podemos, pero ¿del PSOE? Nos están diciendo que como los que ganan menos no pueden ahorrar más de 1.500 euros al año, que los demás tampoco ahorremos.
Con los graves problemas que tiene el sistema público de pensiones, convertirnos en uno de los países que peor trata el ahorro privado para la jubilación es un error que pagaremos caro.