Alcalde, llame al cristalero
Señor Martínez Almeida, no he ido a ninguna de las manifestaciones organizadas por mis vecinos para protestar por el ruido que desde hace meses tenemos que soportar en el distrito de Chamberí, tomado por las ‘terrazas-Covid’, pero estoy tan harta como ellos. Le explico por qué.
Al principio no me pareció mal que se ayudase a los bares a sobrellevar la crisis. Me parecía un gesto de buena vecindad y de solidaridad económica. El paso del tiempo, sin embargo, me ha demostrado que no hay correspondencia entre lo que hemos sacrificado los vecinos y lo que a cambio nos devuelven estos establecimientos, que al menos en mi calle han convertido sus terrazas en un espacio, o aliviadero, cuyos clientes dan rienda suelta a comportamientos que nunca han estado permitidos en el interior de los bares▶ gritos, cánticos y tumultos. Le puedo asegurar que es insoportable, de noche y de día.
Puestos a ayudarnos mutuamente y sobrellevar entre todos la carga que aún representa esta crisis, le propongo que, de prorrogar las licencias de estos auténticos establos, el Ayuntamiento que usted dirige nos financie, creo que es justo, la instalación de cristales de aislamiento cuyo grosor nos permita descansar con unas mínimas garantías. Comprándolos al por mayor, para todos los vecinos afectados, que no somos pocos y que creo que hemos dado ejemplo sobrado de nuestra paciencia, nuestra solidaridad y nuestro compromiso con el proyecto liberal que impulsa su consistorio, creo que podría lograr un buen precio. Estamos para ayudarnos.
GEMA MORENAS
MADRID