La sanidad privada tacha el nuevo modelo de «inflexible y limitante»
La sanidad privada española considera que el nuevo anteproyecto pretende imponer «un modelo inflexible y limitante». Así respondió ayer el sector tras el visto bueno del Consejo de Ministros a la llamada ley de Equidad Sanitaria. El presidente de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), Carlos Rus, explicó ayer a este periódico que este es «un debate contra natura de carácter ideológico en el que se está intentado imponer una solución única como válida y se limita la capacidad de gestión de las comunidades autónomas que son quienes tienen la competencia transferida en Sanidad».
Con este anteproyecto –aseguró Rus– el Gobierno intenta implantar un «modelo inflexible» en un contexto de «aumento del gasto sanitario debido al envejecimiento de la población».
«Eliminar herramientas no parece lo más lógico en este momento y menos haciéndolo de forma obligatoria sin dar a las comunidades la capacidad de elegir», insistió el presidente de ASPE, que representa al 80 por ciento de la sanidad privada en España.
Para ASPE, la colaboración público-privado es un «modelo de éxito», ya que ha permitido «reducir listas de espera en hospitalización, diagnóstico por imagen, terapias respiratorias y diálisis, entre otras». «El paciente quiere buena medicina, no le importa la titularidad o el modelo de gestión», reivindicó.
El presidente de ASPE alertó también de que el anteproyecto «puede acabar judicializándose» por «limitar la gestión de los recursos que son competencia de las comunidades».