Naturgy no está en paz y la CNMV lo sabe
El regulador debería examinar con cuidado las declaraciones del responsable de IFM y sus movimientos
MÜLLER
L Epasado 18 de noviembre quedó constancia en la CNMV de que el fondo australiano IFM ha seguido adquiriendo acciones de Naturgy tras el fracaso de la opa que lanzó en enero y que concluyó a mediados de octubre. IFM pretendía hacerse con el 22,69% del capital, pero sólo consiguió adquirir el 10,83%. Los principales fondos accionistas –CVC y GIP, con el 20% cada uno– se negaron a vender, mientras que CriteriaCaixa se opuso abiertamente a la operación y optó por reforzar su condición de primer accionista pasando del 24,8% que poseía al 26,7% actual. En su momento, según reveló ‘Expansión’, la CNMV limitó los movimientos de La Caixa obligándole a comprar al menudeo en el mercado y vetándole operaciones en bloque lo que le impidió llegar al 30% que deseaba.
Las nuevas compras de IFM –ha adquirido un 0,19% de Naturgy cuando la cotización ha estado entre 2 y casi 3 euros por encima de su oferta pública que fue de 21,07 euros– confirman que el accionariado de una de las principales empresas de energía de nuestro país no está pacificado.
Llama la atención, sin embargo, la actuación tan voluble y caprichosa de IFM y el poco interés que despierta en el regulador. El fondo australiano fijó una aceptación mínima de su opa del 17% de las acciones, lo que le hubiese permitido nombrar dos consejeros. Pero renunció a esa condición cuando se quedó muy por debajo de lo que pretendía. El responsable de IFM en España, Jaime Siles, podía haber mejorado las condiciones de la opa, pero en vez de eso se dedicó a lanzar mensajes atemorizadores para los minoritarios: a ‘Vozpopuli’ le dijo el 4 de octubre que «el accionista de Naturgy sabe que si no vende sufrirá una caída del 23% (diferencial de cotización con otras eléctricas en ese momento), más otro 20% adicional que era la prima con la que lanzamos la oferta en enero». Dos días después, a ‘OK Diario’ le confesaba su decepción con la nueva regulación aprobada por el Gobierno de Sánchez: «Si hoy lanzara la opa por Naturgy, la oferta sería muy inferior». Y, a raíz del reforzamiento de Criteria, añadía: «Todos los analistas dan por hecho que la acción caerá cuando se acabe la opa».
Siles tampoco estuvo muy acertado respecto de «las buenas sensaciones» que tenía sobre la operación planteada. «Todas las señales del mercado nos muestran que vamos a estar en la parte alta de nuestra oferta».
En septiembre, además, se dedicó a poner en duda la continuidad del dividendo, un elemento decisivio para muchos minoritarios. Le dijo a Efe: «IFM está dispuesto a revisar la política de dividendos de Naturgy. Dicha revisión podría resultar en una reducción muy significativa o incluso su eliminación».
En 2018, por publicar dos tuits donde prometía excluir a Tesla de la bolsa, la SEC estadounidense se querelló contra Elon Musk por difundir información falsa. Pero aquí no pasa nada. jmuller@abc.es