Iglesias no renuncia a la política y se desata contra el Gobierno en los medios
▶ El exvicepresidente acusa a Albares de «parecer» del PP y de «debilitar» la posición exterior de España
Para Pablo Iglesias es mucho más fácil cargar ahora contra el Gobierno que cuando estaba dentro en calidad de vicepresidente. Ayer, en un vídeo para una televisión argentina, acusó al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, de «parecer» del Partido Popular y de no contribuir a la imagen exterior de España. En particular, por su relación con la izquierda latinoamericana: «Cada vez se entiende menos el papel de España en América Latina».
Está claro que Iglesias no renuncia a la política. Sentado en el Consejo de Ministros hubiera ejercido presión con otras fórmulas, pero, según confesó él mismo en una de sus últimas intervenciones, le es más cómodo opinar ahora en público sin corsés institucionales.
En el Gobierno se evita hacer valoraciones sobre su exceso de presencia en medios de comunicación para no darle mayor trascendencia. «No se le presta atención, solo se representa a sí mismo», decían ayer fuentes de La Moncloa. «No gusta, pero en absoluto nos desgasta», aseguran. No obstante, no pasan inadvertidos sus intentos de influir en la acción del Gobierno también desde fuera de éste. Y de decir aquello que su sector más fiel –el de Irene Montero, Ione Belarra, Enrique Santiago o Pablo Echenique– no puede verbalizar contra los socialistas, la parte mayoritaria de Gobierno.
«Cabría esperar por lo tanto de un Gobierno de coalición progresista, como el que encabeza Pedro Sánchez, una política exterior coherente hacia la región Latinoamericana», advirtió el ex vicepresidente segundo en un vídeo de casi cuatro minutos, con el que participó en el canal C5N como «doctor en Ciencias Políticas». Él mismo lo compartió en su perfil de Twitter.
Comparación con Zapatero
Iglesias empieza a criticar así al ministro de Asuntos Exteriores al considerar «inverosímil» que comparta militancia socialista con el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. La comparación entre ambos la sostiene por lo siguiente. «[Zapatero] es alguien que no ha parado de demostrar su compromiso y conocimiento sobre América Latina». Pero de Albares dice que «se parece mucho más a cualquier ministro de Exteriores del PP». Le critica por no participar en un acto del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 liderado por Ione Belarra en «homenaje» al proceso de paz en Colombia. «La actitud de Exteriores ante un acto organizado por el propio Gobierno merecería un comentario, pero yo soy quien soy y no debo hacerlo», suelta Iglesias. Previamente, ya había atizado a Albares y al Gobierno de España por condecorar a Iván Duque, presidente de Colombia y líder de la derecha de su país, con la Gran Cruz de Isabel la Católica.
Iglesias también acusa al titular de Exteriores de prohibir un viaje de TVE al Sahara Occidental que, según dice, causó «cierto escándalo, incluso en el PSOE». A su juicio, solo asumió el departamento porque Marruecos «exige casi la cabeza» de su antecesora, Arancha González Laya, después de que España diera asistencia médica al líder del Polisario, Brahim Gali. «La izquierda latinoamericana con responsabilidades de gobierno mira con recelo y desconfianza a un Gobierno español cuya política exterior es difícil de diferenciar de la que haría la derecha», dijo Iglesias. En un guiño a Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos en el Ejecutivo, asegura que Exteriores es «terreno privado e impermeable del PSOE». Su vídeo en C5N se emitió coincidiendo con la visita a Argentina del líder del PP, Pablo Casado.
Moncloa no le hace caso y evita darle trascendencia: «Solo se representa a sí mismo (...) No gusta pero en absoluto nos desgasta»