La defensa de Rivas ya fue amonestada en 2017 por difundir datos del hijo menor
► La madre denuncia ahora ante el fiscal que el juez divulgue un presunto abuso
La defensa de Juana Rivas dio un paso más ayer en su acción judicial después de que saliesen a la luz pública los presuntos abusos sexuales a su hijo menor mientras estaba bajo su custodia. Enrique Zambrano, el actual abogado de su exmarido, es ahora el blanco de la representación legal de la madre granadina, a quien acusa de haber filtrado la información relativa a esos presuntos abusos. El actual abogado de Rivas, Carlos Aránguez, anunció en el día de ayer, además, la denuncia ante la Fiscalía de Menores, el Defensor del Menor y el Servicio de Protección del Menor por la revelación de estos datos sensibles sobre el niño.
Concretamente, apuntan a Zambrano por la filtración del ya archiconocido auto del pasado día 9 de diciembre, escrito por el juez titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Granada, Manuel Piñar, donde el togado rechaza la solicitud de suspensión parcial de la pena por considerar a Rivas «un grave peligro» para sus hijos. Esta afirmación del juez en el escrito está sustentada en el episodio hasta ahora silenciado de los presuntos abusos bajo su cargo, datados en abril de 2017, de ahí que fuera fundamental para explicar la resolución.
En todo caso, resulta llamativo ya que el auto fue primeramente contestado por el propio Aránguez. Este, a través de un comunicado de prensa, calificó el argumento como «repugnante» señalando explícitamente las palabras del juez y, por tanto, dejando vía libre al conocimiento público.
Rivas lo dijo en televisión
De la misma manera, más paradójico resulta aún que las acusaciones partan ahora contra el letrado de Francesco Arcuri, sobre todo teniendo en cuenta que fue Zambrano, en representación del italiano y expareja de Rivas, quien pidió a la juez que se silenciara el asunto en 2017. Entonces el anterior abogado de Rivas había deslizado tanto en el programa de Antena 3 ‘Espejo Público’ como en otro programa matinal de Telecinco la existencia de la investigación de esos abusos, un hecho que hizo a la Justicia tomar cartas en el asunto.
En el auto, al que ha tenido acceso este periódico, la juez María Ángeles Jiménez, del Juzgado de Instrucción número 2 de Granada, apuntaba «especialmente» a Rivas y a su equipo jurídico a la hora de proteger los datos del menor. Se trataba de un momento complicado a nivel mediático para la madre granadina, ya establecida como figura pública. Los niños debían volver con su padre a Italia y la presencia tanto de Rivas como la de su abogado era continua en las mañanas de cada televisión.
La presencia de los abusos servía entonces en la maraña de informaciones como un acicate contra Arcuri, que reclamaba la vuelta de los niños mientras la madre señalaba un nuevo estudio forense del menor afectado como razón para quedarse en España. Algo que sorprendió a la defensa del padre, ya que ese supuesto abuso se habría cometido bajo la custodia de Rivas y no tenía noticia hasta el momento.
La juez ordenó entonces silenciar desde ese momento, octubre de 2017 en adelante, la información acerca de los menores con el fin de protegerlos. Incluso se llegó a secuestrar una noticia de la ya extinta revista ‘Interviú’, cuya publicación daba explícitos detalles sobre lo ocurrido al hijo de Rivas y Arcuri en un artículo titulado «Caso Juana Rivas: el otro sumario».
A partir de entonces, el asunto de los supuestos abusos quedó sepultado desde la Justicia con amonestación especial para Rivas y sus abogados, quienes ahora utilizan ese mismo dictamen para atacar al juez Piñar.