El PP se volcará en Castilla y León para no depender de Vox

▶ Satisfacción con la encuesta que le acerca a la mayoría absoluta y confianza clara en poder lograrla el 13-F

Subidón en el PP tras la publicación ayer de la encuesta elaborada por GAD3 para ABC que deja a los populares muy cerca de la mayoría absoluta a la que aspiran. Satisfechos ya con un estudio que les otorga entre 37 y 39 escaños cuando el objetivo es alcanzar los 41 que les permitirían gobernar sin la necesidad de recoger apoyos de nadie, consideran que tienen espacio de mejora una vez que la sorpresa –y cierto rechazo– por la convocatoria electoral anunciada el pasado lunes vaya quedando atrás.

Para colaborar en un reto mayúsculo, la dirección nacional del PP, consciente de la importancia de los comicios para marcar un camino claro que los conduzca a La Moncloa, se volcará de lleno en la campaña castellano y leonesa. El objetivo es impulsar la figura de Alfonso Fernández Mañueco para que tenga las manos libres a la hora de formar gobierno y que Vox «no pinte nada» ni tenga la llave de la gobernabilidad. Conseguiría empezar a construir así también un «relato nacional» para contraponer en toda España la «debilidad» de Santiago Abascal con la «fortaleza» de Pablo Casado, según detallaron a Europa Press fuentes populares.

Y es que en Génova dan por sentado que el PP «va a crecer sí o sí» en las elecciones del próximo 13 de febrero y manejan datos internos que podrían dar a Mañueco la mayoría absoluta al recuperar buena parte de los votantes que se fueron a Ciudadanos en los últimos comicios, cuando logró 12 procuradores y finalmente se alió con el PP pese a las reticencias iniciales de Francisco Igea, aún no confirmado como cabeza de lista en la formación naranja.

Una vez que el PP da por «amortizado» a Cs –solo lograría un representante–, ahora se trataría de diluir a Vox, una labor que se antoja más compleja porque la formación de derechas parece que tendría mucho que decir en el nuevo gobierno de la Junta de Castilla y León. Los diez escaños que lograría le convierten en clave para la investidura de Mañueco. Es lo que el PP tratará de evitar en las próximas semanas confiando también en que el candidato que elijan los de Abascal no convenza a los castellano y leoneses, que ya les dieron la espalda en las autonómicas de 2019 en parte por presentar un cabeza de lista totalmente desconocido en esta tierra.

Fuentes del PP argumentan que la imagen de un Vox «débil», unido a «una bajada de impuestos y una buena gestión de la pandemia», crea «todo un relato» en favor de Pablo Casado. En ese momento, prosiguen, los ciudadanos empezarán a pensar en la ventaja de concentrar el voto de centroderecha en el Partido Popular si hay generales para «echar a Sánchez» de La Moncloa, visualizando además que es la «única alternativa» posible al Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos. «Ahí no es solo que se fortalezca a Casado, es que lo catapulta», sentencian fuentes del partido.

Frente al «engendro»

En clave más autonómica, el Partido Popular de Castilla y León reaccionaba a la encuesta publicada en este periódico asegurando también que la formación aspira a tener una mayoría «suficiente» para gobernar «en solitario».

En un mensaje en su perfil de Twitter, trasladaban que están en el «buen camino», aunque «queda mucho por hacer». En el mismo sentido, se pronunció el vicesecretario de Comunicación del Partido Popular en Castilla y León y portavoz del PP en las Cortes, Raúl de la Hoz, quien subrayó que la encuesta es una foto que señala que la formación está «cerca» de poder gobernar sin tener que depender de «nadie» y «sin riesgos», lo que facilitaría la «estabilidad» en la Junta.

Además, De la Hoz expresaba, en la línea manifestada estos días por el presidente del Gobierno regional, que «serán los ciudadanos y no las mociones de censura los que determinen el próximo 13 de febrero si quieren el gobierno del único partido de Castilla y León que representa el presente y el futuro de esta tierra o si por contra prefieren el engendro de los pactos de Sánchez en la Comunidad». Lo decía en referencia a una supuesta alianza de partidos con representación en las Cortes Autonómicas según el estudio demoscópico (PSOE, Podemos, UPL, Ciudadanos y Soria ¡Ya!) o alguno más que puede aún aspirar a ella (Por Ávila u otro partido vinculado a la plataforma España Vaciada). En todo caso, según el estudio de GAD3, estarían muy lejos de poder ser una alternativa de Gobierno.

En las filas del PP no preocupan en exceso estas nuevas formaciones porque, al margen de la soriana, con una larga trayectoria reivindicativa en su provincia y en la Comunidad, a otras el adelanto electoral les ha pillado «con el pie cambiado» y con menos margen para organizarse y poder presentarse. Además, hacen hincapié en que el corte para entrar en las Cortes es alto, porque requiere llegar al 5% en cada provincia y no parece tarea fácil.