Planas envía a la Comisión Europea el plan para repartir los fondos PAC
España recibirá 47.724 millones hasta 2027 y, para ello, refuerza la condicionalidad ‘verde’
El último Consejo de Ministros del año, celebrado ayer, sirvió para cumplir con otro compromiso adquirido con Bruselas. El ministro de Agricultura, Luis Planas, informó en la rueda de prensa posterior a la reunión del Gobierno del envío hoy a Bruselas del Plan Estratégico para la aplicación de la Política Agraria Común (PAC) para el periodo 2023-2027. Es decir, la hoja de ruta que determinará el reparto de los 47.724 millones de euros que recibirá España durante el periodo mencionado y de las que dependerá el sustento de unos 630.000 agricultores y ganaderos. En esta línea, el Ejecutivo también dio luz verde al Anteproyecto de Ley de Gestión de la PAC, que desarrollará el régimen sancionador para quienes no cumplan con las condiciones de las ayudas.
La remisión a la Comisión Europea, antes del próximo 1 de enero, es un hito más en un calendario marcado por el examen de las autoridades comunitarias que previsiblemente darán su ‘sí’ definitivo a la propuesta española durante el primer semestre del próximo año, para que el plan entre en vigor el 1 de enero de 2023 previa incorporación de las alegaciones y observaciones europeas, así como de las derivadas del proceso de evaluación ambiental –de carácter público– puesto en marcha el pasado 30 de noviembre y que se prolongará un mes más.
En concreto, el plan que se remite hoy a Bruselas –que culmina un trabajo conjunto del Gobierno con las comunidades autónomas y el sector de tres años– fija los ejes para la distribución de los 47.724 millones de euros que recibirá España hasta 2027 de la PAC que, sumada a la cofinanciación nacional, superarán los 50.000 millones. De este presupuesto, más de 4.800 millones anuales irán dirigidos a las ayudas directas al agricultor y ganadero. Unos 700 millones (612 millones de las arcas europeas) estarán dirigidos a medidas de mercado para apoyar a sectores como el de ‘Frutas y Hortalizas’. Como novedad, se añade un programa para el olivar extensivo.
Finalmente, otro montante de unos 1.700 millones (1.521 millones de fondos europeos más financiación nacional) se dirigirán a desarrollo rural. De todas las actuaciones, en este ámbito, el 47% serán medidas medioambientales (agricultora ecológica, para el sector forestal...). El ministro también anunció novedades en las ayudas directas, dotadas con 4.800 millones anuales. Planas anunció la reducción de las regiones de pago de 50 a 20 y la introducción del denominado «pago redistributivo» que supone un 10% de todas las ayudas –483 millones anuales– para apoyar a las pequeñas y medianas explotaciones. «También hemos introducido un tope a las ayudas de 100.000 euros descontando los gastos empleo hasta un máximo de 200.000 euros, con regresividad a partir de los 60.000 euros, para favorecer una mejor redistribución hacia la agricultura profesional y familiar», apuntó el ministro.
Condicionalidad verde
Los ‘ecoesquemas’, de carácter voluntario, serán el 23% de los fondos (1.107 millones/año) para prácticas medioambientales
Sin embargo, el cambio de mayor calado respecto a PAC anteriores está en la introducción de los ‘ecorregímenes’ o ‘ecoesquemas’, de carácter voluntario, que constituyen el 23% de los fondos –la ‘ayuda básica’ y ‘el pago redistributivo’ ya suman el 60% de las ayudas– y que supone dedicar 1.107 millones de euros anuales «a prácticas singulares y voluntarias que primen la conservación del agua, el suelo, el aire, la biodiversidad y el paisaje», en palabras de Planas.
Otros aspectos relevantes son las ‘ayudas asociadas’, un 15% de los fondos (692 millones de euros al año) dirigido a sectores en dificultades como el vacuno de leche, el ovino caprino y la remolacha. También se dedicará un 2% de las ayudas (97 millones al año) para el relevo generacional.