El fair play trae de cabeza al Barcelona
∑ Laporta promete a Haaland, pero Ferran Torres aún no puede ser inscrito y el debut de Alves está en el aire
Las optimistas palabras de Mateu Alemany durante la presentación de Ferran Torres respecto a las intenciones en este mercado invernal no se están cumpliendo como el Barcelona pretendía. «Con Dani Alves tenemos margen suficiente para inscribirle. La incorporación de otros fichajes dependerá de otras salidas. Con Ferran Torres hemos hecho una excepción. Cuando hagamos efectivas las salidas, decidiremos si podemos incorporar a alguien más. Pero el domingo esperamos tener solucionado el fair play financiero», aseguró el director de fútbol del club catalán. Y para reafirmar las declaraciones del ejecutivo, Laporta no descartaba el fichaje este verano de Haaland, en lo que supondría una faraónica operación entre traspaso, sueldo y comisiones. ‘Cuatro’ aseguraba ayer que el presidente había llegado ya a un principio de acuerdo con Mino Raiola, agente del noruego, para que acabe el próximo verano en el Camp Nou. La única condición es que el Barcelona pueda reunir los más de cien millones que costaría.
Pero este mismo martes, el club se dio de bruces con la cruda realidad. La misma que obligó al Barcelona a desprenderse de Messi y Griezmann. Al cierre de esta edición, Dani Alves aún no había podido ser inscrito a pesar de que el brasileño percibe unos emolumentos testimoniales y el club azulgrana liberó masa salarial tras la obligada retirada del Kun Agüero. El partido de hoy ante el Linares Deportivo en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey tenía en el debut del lateral, cinco años después de su salida, uno de los grandes alicientes en clave culé.
Necesita el Barcelona deshacerse de Coutinho y de Umtiti (dos de las fichas más elevadas del vestuario azulgrana) y renovar a Dembélé (la amortización pendiente se repartiría entre los años que se prolongara el contrato) para entrar dentro de los parámetros de LaLiga, aquellos que le permitirían inscribir a Ferran Torres y realizar algún fichaje más durante esta ventana invernal. Pero de momento se encuentra con la reticencia de los dos primeros a marcharse antes de tiempo y con la negativa del extremo francés a renovar por las cantidades que el Barça puede asumir.
El palo de Bordalás
«El Barcelona tiene una deuda de 300 millones y ha fichado a Ferran Torres. He leído que por 55 millones. Y va a fichar a Morata. Y el presidente anuncia más fichajes, incluso Haaland. ¿Cómo es posible? ¿Dónde está el fair play? Entonces nosotros si queremos ser un club grande también tenemos que fichar, obviamente», denunciaba ayer José Bordalás. El técnico del Valencia insistía en sus quejas: «No es porque lo diga yo, es la realidad. Lo dije hace poco. El Barcelona ha fichado a Xavi y ha visto que no le da para llegar a pelear por Champions y estar entre los mejores, esta es la realidad».