Derrumbe mortal en un colegio de Gijón: «De golpe se vino abajo»
► Dos trabajadores fallecieron y otros dos resultaron heridos al desplomarse un techo
Un trágico accidente tiñó de luto el día previo a la llegada de los Reyes Magos en Gijón. Dos trabajadores murieron y otros dos resultaron heridos al desplomarse el techo del colegio San Vicente de Paúl, en el cruce de las calles Ezcurdia y Caridad en Gijón. Los cuatro se encontraban trabajando en el inmueble, cuando por causas que aún se desconocen, el techo se vino abajo poco antes del mediodía. Parte del forjado de la terraza de la azotea del edificio se derrumbó sobre el equipo de trabajo.
Hasta el lugar del accidente se desplazaron con rapidez tanto los bomberos como la Policía Nacional y Local con el fin de atender a las posibles víctimas. Toda la zona fue acordonada para poder facilitar el acceso de los equipos de rescate y las ambulancias, además de garantizar la seguridad de los viandantes ante el temor de que pudiera continuar el desplome del techo. Poco después del accidente, los bomberos consiguieron rescatar con vida a dos de los trabajadores. Uno de ellos, con heridas leves, fue atendido en el mismo lugar del accidente. Una ambulancia trasladó al otro herido, más grave, al hospital de Cabueñes. Vicente Moirón, uno de los supervivientes, le contó a ‘El Comercio’ lo ocurrido. Este trabajador aseguró que todo se produjo «de golpe y porrazo». «Estábamos colocando pladur y de repente se vino abajo. Era una obra normal, para cambiar el pladur». Según apuntó, no había visto ningún posible problema en la estructura del edificio: «No lo vi nada rajado ni doblado. Nada de nada. Corriente y moliente». Moirón es familiar de los dos fallecidos: su yerno, David Velasco, y el primo de este, Andrés Velasco. Un cuarto trabajador, ceutí, sufrió lesiones en una muñeca, aunque tuvo que ser trasladado al hospital para ser atendido por sus heridas.
Explicaciones
Hasta el lugar del accidente se desplazó el presidente del Principado, Adrián Bardón, junto a la alcaldesa de Gijón, Ana González, y la consejera de Educación, Lydia Espina. Barbón dijo que «es una tragedia. Cuando me avisaron acababa de terminar una reunión. Ya estaba de camino la consejera de Educación pero yo mismo quería estar aquí, junto a la alcaldesa, acompañando a los miembros de la Corporación. También hemos estado con la gente del colegio». Añadió que «ahora toca que alguien explique lo sucedido, pero es una enorme tragedia que se haya hundido parte del forjado y se lleve la vida de dos personas».
También muy afectada se vio a la alcaldesa de Gijón que quiso trasladar «nuestro afecto y cariño a la familia, que lógicamente está absolutamente destrozada, porque al final cuatro personas salen a trabajar por la mañana y les pasa esto. También quiero manifestar nuestras condolencias al colegio; la comunidad educativa está muy afectada». Por el lugar del suceso pasaron el director del centro y antiguas hermanas de la congregación, a quienes la regidora señaló que «cuentan con todo el afecto de sus vecinos».