El reto de la maestra Muguruza
∑Después de su título de Guadalajara, estrena el curso en Sídney con el objetivo de mantener ese altísimo nivel
Fue tan buena la temporada pasada que la españolía se engancha de pleno al circuito femenino del tenis, con dos argumentos de peso como para confiar en cosas importantes. Garbiñe Muguruza, maestra de maestras después de aquella prodigiosa victoria en Guadalajara, abre el telón del curso 2022 con la certeza de que sigue estando en ella esa tenista descomunal que llegó a ser número uno y que tiene dos grandes en su palmarés. Nunca se fue, pero sí que es cierto que no mantuvo la solidez necesaria en momentos puntuales, reconducida por Conchita Martínez cuando se había desviado un poco del camino. Esta semana compite en Sídney (debutará ante la rusa Ekaterina Alexandrova o la kazaja Elena Rybakina) y, aunque lleva bastante sin competir, es una de las candidatas al Abierto de Australia.
Le encantan los grandes escenarios y Melbourne servirá como prueba de fuego para comprobar esa tendencia tan al alza del final de 2021. «No siento que todos los años que empiezo tenga metas distintas o que empiece de cero. Una carrera es una continuación y una progresión. Siento que tengo los mismos grandes objetivos que tenía desde que empecé a jugar en la WTA, que es ganar los grandes títulos, conseguir los títulos que todavía no tengo», resume con franqueza, la primera en reconocer que su deseo no es otro que tener los cuatro Grand Slams (tiene Roland Garros y Wimbledon).
Muguruza ha trazado ya su libro de ruta, al menos la primera parte de un calendario siempre sujeto a cambios por el coronavirus. Después de Australia, tiene previsto jugar en Dubái, Doha, Indian Wells, y Miami y pasar luego a la tierra con Charleston, Mutua Madrid Open, Roma y Roland Garros. Además, estará en Berlín para preparar Wimbledon. Después de su éxito en Guadalajara, se tomó unas vacaciones y optó por retrasar su vuelta a las pistas, pero continuó haciendo trabajo físico. «Aunque estuviera en el resort, iba al gimnasio, nunca dejé de entrenar. Tenía que dar descanso al cuerpo, pero no puedes pararte por completo, porque es como un gran ‘shock’ no hacer nada. Así que mantuve un poco los entrenamientos. Necesitas al menos tres semanas para descansar y luego empezar a ponerte en ritmo, especialmente si acabas de terminar tan tarde el año. La pretemporada y las vacaciones me sirvieron para recuperarme de ese año largo y difícil con las burbujas y las restricciones y algunos torneos sin público y otros con. Fue un año un poco montaña rusa».
Espera que 2022 sea más regular en todos los sentidos, también en su juego. «Tengo muchas ganas de mantener o tratar de mantener ese nivel y ese estilo de juego. Jugué bien en 2021. Por supuesto, es necesario jugar bien para tener una buena temporada. Sentí que sí, jugué mi estilo de juego. Siento que también me adapté mejor a los momentos en los que no podía hacer mi estilo de juego, encontré la manera de mantenerme en los partidos en cada momento y nunca sentí que no iba como yo lo quería». He ahí la gran evolución de Muguruza, mucho más madura y serena a la hora de afrontar situaciones incómodas que en otros momentos le atormentaron.
En su momento, cuando asomaron las nubes, se reunió con su equipo para valorar la situación y para escuchar reflexiones crudas. No siempre tuvo la seguridad con la que se mostró la pasada campaña y eso tiene que ver, ella mismo lo dice, con la confianza. «Pero no siempre puedes hacer tu estilo de juego. Hay momentos en los que tienes que adaptarte y tienes que estar abierta a eso. Siento que el año pasado estuve muy abierta a cualquier momento difícil, abierta a manejarlo de la mejor manera que pudiera, y eso es todo».
Tiene una espinita clavada de Australia, pues perdió la final de 2020 ante Kenin después de ganar el primer set, y dice que Ashleigh Barty, número uno del mundo, es la gran favorita. Ella está ahí, en la terna de candidatas, y se lo ha ganado a pulso. «Tengo muchas ganas de enfrentarme a ella, significará que estamos en rondas finales».
«Siento que tengo los mismos grandes objetivos que tenía desde que empecé a jugar, que es ganar los grandes títulos»