UGT amenaza con movilizaciones si Sánchez no sube el SMI a mil euros desde el 1 de enero
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, amenaza con convocar movilizaciones si el Gobierno no cumple su palabra de subir el salario mínimo a mil euros con efectos retroactivos desde el 1 de enero de este año.
Así lo anunció ayer en una rueda de prensa en la que hizo balance del año pasado, del que destacó las derogaciones –«es la palabra adecuada», subrayó– de las reformas de las pensiones y de la laboral del PP.
Álvarez dijo que la subida del salario mínimo, que afectará a unos cuatro millones de trabajadores, es innegociable. También exige que el incremento de la inflación «se debe de ver reflejado en los salarios», aunque no quiso adelantar una cifra o porcentaje hasta consensuarlo con CC.OO. «Pasó en Cádiz, pero va a pasar en Asturias, Madrid o Barcelona; en todo el país, porque la gente no se va a resignar a tener aumentos salariales del 1,5% o del 2% cuando tenemos una inflación del 6,7%».
El secretario general de UGT afirmó que si la reforma laboral recientemente aprobada sufriera alguna modificación en su trámite parlamentario «debería volver a ser revisada por los agentes sociales».
No es un país «normal»
Calificó de «surrealista» la actitud de rechazo del PP, sobre todo cuando el acuerdo de la reforma laboral contó con el apoyo de la CEOE. Álvarez ha criticado la oposición de los populares desde antes de conocer la reforma y le ha recordado a Pablo Casado que «se trata de España». «Si viviéramos en un país normal, el PP daría soporte a la reforma, con un apoyo o una abstención. Como vivimos en un país en el que eso no es posible y hay que atender a cuestiones de carácter político, creo que entre que se apruebe o no se apruebe, prefiero que se apruebe con algún acuerdo», añadió, en relación a posibles enmiendas de otros grupos parlamentarios.
También anunció que en «la segunda parte de la negociación para la derogación de la reforma laboral del PP» exigirá que la indemnización por despido improcedente vuelva a ser de 45 días por año trabajado, desde los 33 días que fijó el anterior Gobierno.
En otro acto, el secretario general de CC.OO., Unai Sordo, pidió ayer a los grupos parlamentarios que apoyen «sin más» la convalidación de la reforma laboral.