El PP pide medidas para impedir que el PSOE use el Congreso de forma partidista
Los populares solicitan a Batet que preserve «las funciones» de la Cámara Baja
El grupo parlamentario que preside Pablo Casado considera un «bochorno democrático» que el PSOE utilizara el miércoles la sesión de control al Gobierno para hacer campaña por las elecciones de Castilla y León del próximo día 13, y pide a la presidenta de la Cámara Baja que adopte las medidas necesarias para que el episodio no vuelva a repetirse. En un escrito remitido ayer y adelantado por ABC, los populares consideran dañada la imagen del Congreso y atacada la separación de poderes, por lo que exigen que el Ejecutivo se someta al control de la oposición con «rigor».
El documento, firmado por la portavoz parlamentaria Cuca Gamarra, carga también contra la propia Batet, a la que acusa de «pasividad». «No intervino en el debate, no ejerciendo la función de magistratura arbitral, de manera neutral e imparcial», acusa el escrito, tras subrayar que varios miembros del Gobierno «eludieron su obligación
de contestar a las preguntas realizadas por los diputados, convirtiendo la sesión en un mitin, atacando a otras instituciones y no dando cuenta de sus gestión como están obligados».
Además del PP, Vox, Ciudadanos, Junts, Más País o Compromís han expresado estos días su rechazo a este episodio. Bildu ha manifestado su sorpresa y ERC ha considerado que lo sucedido se califica por sí mismo, después de que cuatro diputados socialistas pidieran intervenir en la sesión de control al Gobierno para plantear preguntas a los ministros y acabaran atacando al presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (PP).
Uno de los parlamentarios ni siquiera llegó a plantear pregunta alguna. Posteriormente, los cuatro ministros interpelados utilizaron su tiempo para cargar contra la gestión de los populares en esta comunidad y hacer propaganda de las políticas socialistas.
«Deriva totalitaria»
Además de referirse a lo sucedido el miércoles, los populares utilizan su escrito para denunciar lo que consideran «habituales actitudes autocráticas» del Ejecutivo, así como una «deriva totalitaria».
A su juicio, no se trata de una «mera opinión o crítica política», sino que «cada día» hay ejemplos del «desprecio» que el Gobierno socialista tiene al Poder Legislativo.
Entre ellos, los populares citan el abuso del veto contra las iniciativas de la oposición y de la tramitación de urgencia para los proyectos de ley y proposiciones de los socios del Ejecutivo, el rechazo a las comparecencias de expertos afectados por la tramitación de nuevas regulaciones o las ausencias «no justificadas» de los miembros del Gobierno en la sesión de control. La lista, señalan, es «interminable», por lo que también piden a Batet que recuerde al Ejecutivo sus obligaciones constitucionales.