Jessica Chastain, a todo color
‘LOS OJOS DE TAMMY FAYE’
Director: Michael Showalter. Con: Jessica Chastain, Andrew Garfield, Vincent D’Onofrio...
Del director Michael Showalter pudo verse hace no mucho la agradable comedia ‘La gran enfermedad del amor’, original, multicultural y bien limada en sus contornos. Lo que ahora estrena es un drama biográfico no tan bien limado sobre una pareja que fue muy popular en la televisión estadounidense durante los años setenta, Jim Bakker y Tammy Faye, telepredicadores hiperventilados y cuya relación entre ellos, pero también con la fe, el dinero y la hipocresía en ese mundo del óbolo y la cháchara le permiten al director relatar con notable y cromática puesta en escena el talento que se necesita para ascender y la cantidad de coartadas que se cruzan para convertir ese talento en caída libre. Y de eso trata el argumento.
Aunque el fondo de la historia está lleno de sordideces, la pareja protagonista arroja cierta simpatía sobre los ojos del espectador, probablemente por la interpretación desinhibida de Andrew Garfield, que le saca jugo a lo lelo de su rostro, y por la de Jessica Chastain, solo reconocible a veces dentro de ese pote de ingenuidad, cursilería y malicia de Tammy Faye, de la que muestra un recorrido físico y mental que no cabe en una media maratón. El relato de sus hazañas, desde que se conocieron hasta… todo lo demás, está narrado con cámara alegre y con mucha salsa satírica, con gran ritmo y no menos maquillaje (al rostro y a la indumentaria de Chastain no le cabe ni un brochazo de Willem de Kooning). En lo que se desprende de los ojos de Tammy Faye hay ilusión, convicción y amargura, también una crítica al sueño americano y sus pesadillas. Pero lo digno de ver es el espectáculo de Chastain.