El #MeToo se lleva a Overmars por delante
El neerlandés, hasta ayer director deportivo del Ajax, «el mejor» según la directiva del equipo, es despedido por mensajes inapropiados a compañeras de trabajo
«Es devastador para las mujeres que han tenido que lidiar con esta situación», dice el Ajax
El fútbol respira el mismo aire que la sociedad y si en los último tiempos la segunda, en buena parte, se adherido al movimiento #MeToo, que denuncia actos de acoso contra la mujer, el deporte rey parece no estar exento de dicha responsabilidad. Ayer fue Marc Overmars, director deportivo del Ajax y exjugador, también en equipos como Arsenal o Barcelona, quien tuvo que asumir la culpa y dar un paso al lado. «Estoy avergonzado», reconoció el exfutbolista cuando fue despedido por el equipo de Ámsterdam, después de que un informe interno del club lo señalase como culpable de «mensajes inapropiados» a varias compañeras y trabajadoras del equipo. El documento, además, informaba que esta práctica había sido recurrente durante un largo periodo de tiempo. No dudó el Ajax en despedir a Overmars, pese a que su peso en los éxitos del equipo es total desde los despachos, responsable de los traspasos, de la red de ojeadores y de la cantera, este último un apartado emblemático para el conjunto de Países Bajos. El de Emst llegó a la dirección deportiva en 2012 y bajo su mano el Ajax ha ganado cuatro ligas (2013, 2014, 2019 y 2021) y dos copas (2019 y 2021). Además, el equipo juntó a un camada de canteranos extraordinaria en 2018, aquella formada por De Jong, De Light, Ziyech o Van de Beek entre otros, que eliminó al Real Madrid en los octavos de final y estuvo a un pellizco de meterse en la final de la Champions League. Tampoco distorsionó la balanza a la hora de despedir a Overmars que el jugador llevase colgado el emblema de leyenda del club desde hace tiempo, campeón de la Copa de Europa con su escudo en la temporada 94/95. Tolerancia cero.
Al menos esa fue la sensación que transmitían las palabras de Leen Meijaard, presidente del Consejo de Supervisión, tras anunciar la marcha de Overmars, que recientemente había ampliado su vinculación con el equipo hasta 2026 por su buen hacer como director de fútbol y su reconocido olfato empresarial y futbolístico, ya desde los tiempos en los que era jugador del Barcelona.
«Es devastador para las mujeres que han tenido que lidiar con este comportamiento. Cuando nos enteramos, actuamos de inmediato. Marc es probablemente el mejor director de fútbol que ha tenido el Ajax, pero se ha pasado de la raya, por lo que continuar como director no era una opción», aseguró el directivo. Igual de contundente, aunque bastante afectado en sus palabras, fue Edwin van der Sar, mítico portero neerlandés del Manchester United, además de compañero de Overmars tanto en el Ajax como en la selección. «Un clima de trabajo seguro es muy importante para todos. Marc y yo hemos pasado mucho juntos. Pero ahora todo se para de manera muy abrupta. Estamos trabajando en algo muy hermoso aquí, por lo que esta noticia también será un golpe para todos», aseguró el ahora CEO del Ajax.
«Estoy avergonzado»
Overmars, en la línea del equipo que hasta ayer representaba, pidió perdón y optó por salir rápidamente del foco mediático y social con un comunicado. «Estoy avergonzado. La semana pasada me enfrenté a informes sobre mi comportamiento. Desafortunadamente, no me di cuenta de que estaba cruzando los límites, pero me quedó claro. No veo otra opción que dejar el Ajax, con un gran impacto en mi situación privada. Es por eso que les pido a todos que me dejen a mí y a mi familia en paz».
Como es habitual en estos casos, las consecuencias han ido más allá del plano deportivo o social. Una vez se conoció su destitución, los principales patrocinadores del Ajax se apresuraron a marcar distancias con el antiguo extremo mientras que apoyaban la decisión de la junta. Incluso la cotización en bolsa del equipo cayó, casi un 5%, tras la turbulenta madrugada de ayer en las oficinas del Johan Cruyff Arena.