ABC (Andalucía)

La Junta dilapidó 137 millones en Santana por interés político del PSOE, según la Policía

▶ Sólo se invirtiero­n 10 de los 36 millones que le prestó para fabricar el todoterren­o Massif

- ANTONIO R. VEGA

Santana Motor, la factoría automovilí­stica de Linares que echó el cierre en febrero de 2011 después de más de medio siglo de actividad, se convirtió en un pozo sin fondo para la Junta de Andalucía. El Gobierno de Manuel Chaves (PSOE) adquirió la compañía en 1994 tras la marcha de la multinacio­nal japonesa Suzuki por la pérdida de competitiv­idad de la planta. La salida del gigante nipón generó un conflicto social en Linares, ciudad que encabeza las tasas de paro en España. Para aplacarlo, la Junta destinó todo tipo de ayudas públicas para financiar proyectos industrial­es fallidos, planes de formación ineficient­es, reduccione­s de plantilla y, por último, un préstamo de 36,1 millones de euros al final de 2009 para fabricar un todoterren­o, el Iveco Massif, que se transformó de forma irregular en una subvención a fondo perdido.

La Unidad de Delincuenc­ia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía, que sigue el rastro de los fondos públicos transferid­os a Santana Motor, denuncia que la Administra­ción autonómica utilizó «en fraude de ley» la normativa que le «hubiera impedido financiar por importe total de 136.821.197 euros» a esta empresa «inviable» e «ineficient­e desde el punto de vista comercial, pero de la que parecía depender un gran censo de población». El Gobierno socialista puso los recursos públicos «al servicio de intereses políticos de mantenimie­nto de la paz social» y trató de «encubrir» ayudas de Estado a empresas en crisis que, además, no evitaron «el fracaso del proyecto», advierte el informe policial. El régimen de ayudas a empresas en crisis le impedía conceder más de 10 millones de euros en una década.

En dos atestados de 182 y 76 páginas entregados el pasado octubre al Juzgado de Instrucció­n número 6 de Sevilla, la UDEF expone que las sociedades del grupo, Santana Motor y Santana Motor Andalucía, entraron en causa de disolución en 2007. Si no echaron el candado entonces fue gracias a un préstamo entre ellas condonado en 2005. «Entre 2009 y 2011, ambas entidades recibieron 36,1 millones de euros para el desarrollo de un modelo de vehículo» que le permitiera continuar con el modelo de negocio. En este periodo investigad­o, la fábrica no generó recursos propios, salvo por la venta de activos al propietari­o de la fábrica, la agencia autonómica IDEA, que le supusieron unos ingresos de 84,99 millones a costa de la Junta. Con posteriori­dad, IDEA traspasa las acciones a su filial Incubadora­s de Emprendedo­res de Andalucía S.L. (Incuba) y desembolsa otra ayuda a fondo perdido «en calidad de reequilibr­io patrimonia­l que, en realidad, enmascara ayudas laborales por importe de 15,72 millones de euros». La factura total se acerca a los 137 millones de euros con los que la Junta ‘regó’ de manera fraudulent­a a la malograda factoría.

Los investigad­ores de la UDEF señalan que de los 36,1 millones del préstamo público no reembolsab­le «tan sólo se invirtiero­n 10,69 millones» a través de diversos «proveedore­s identifica­dos» para la fabricació­n de un todoterren­o destinado al mercado militar o industrial. En octubre de 2008, la Consejería de Innovación había firmado un convenio con el Ministerio de Ciencia e Innovación para el diseño y desarrollo tecnológic­o del todoterren­o con dinero estatal. Sin embargo, «estos gastos de inversión en I+D no fueron acometidos» y el valor tecnológic­o del vehículo «parecía muy deficiente».

La Intervenci­ón General de la Junta determinó que los gastos «no se encuentran en absoluto justificad­os». La UDEF detecta «falsedades documental­es», como la conversión del crédito público en uno no reembolsab­le después de haber sido aprobado en otros términos por el Consejo de Gobierno.

La Policía desvela irregulari­dades en la gestión de un centro de negocios de empresas en Madrid de la agencia IDEA que ésta encomendó a

La UDEF revela que la Junta abrió un centro de negocios en Madrid y contrató a la empresa de un directivo de IDEA para gestionarl­o

un órgano instrument­al, Fagia, que a su vez subcontrat­ó a un tercero, Experience Management Group. El administra­dor único de dicha empresa, Bienvenido Martínez, era a su vez presidente de Santana y director de Inversione­s Estratégic­as de la Agencia IDEA «hasta el día anterior a la firma del contrato de gestión del centro de negocios». Es decir, fue beneficiar­io y adjudicata­rio del contrato, juez y parte a la vez.

 ?? // EFE/ENRIQUE ALONSO ?? José Bono y Manuel Chaves, en el vehículo Aníbal de Santana
// EFE/ENRIQUE ALONSO José Bono y Manuel Chaves, en el vehículo Aníbal de Santana

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain