Ómicron ‘sigilosa’ se expande por una Europa casi sin restricciones
► El nuevo sublinaje representa el 8% de los casos en España, donde pronto será dominante
El Reino Unido, que ya no obliga a guardar cuarentena a los positivos en Covid ha pasado de 489 a 868 casos por millón de habitantes
Cuando se cumplen dos años del inicio de restricciones por la pandemia de coronavirus, la situación no puede darse aún por controlada. Si en España la remisión de casos se truncó el pasado viernes cuando se registró un ligero aumento de la incidencia acumulada –por primera vez desde el mes de enero–, Europa asiste también a un alza en el número de contagios, aunque las causas pueden ser diferentes.
Países como Austria, Portugal, Suiza, Grecia, Alemania y Reino Unido dibujan ya una curva en claro ascenso. Tres factores podrían resultar claves para entender la razón que hay detrás de este problema. Por una parte, coincide con la relajación de restricciones, pero también con un mayor nivel de transmisión debido a la variante BA.2 –un sublinaje de Ómicron– y a una disminución de la inmunidad en personas vacunadas, ya que a nivel europeo apenas el 50% de la población ha recibido una dosis de refuerzo.
El Reino Unido ‘gripalizó’ la pandemia hace tres semanas, eliminando las restricciones e incluso el aislamiento para los casos positivos. Allí, el número de casos confirmados por cada millón de habitantes tocó fondo el 28 de febrero (con 489, según ‘Our world in data’), y desde entonces ha ido en aumento; el último dato, del 11 de marzo eleva esta tasa hasta los 868. Por otra parte, Austria, que acaba de suspender la vacunación obligatoria durante «al menos tres meses» por la propia evolución de la pandemia, ha pasado estas dos últimas semanas de registrar 2.925 casos por millón de habitantes a 4.160. Lo mismo ocurre con Países Bajos, donde la incidencia se ha multiplicado por dos (de 2.433 a 3.835 en las últimas dos semanas) y Alemania (de 1.885 a 2.339). Precisamente en Alemania, con cifras récord de contagios en toda la pandemia, a partir del 20 de marzo desaparecerán prácticamente todas las limitaciones, aunque está previsto que se mantengan medidas como el uso obligatorio de mascarilla en hospitales, residencias de ancianos y medios de transporte.
Por su parte, los franceses ya no están obligados a portar desde ayer la mascarilla en el trabajo ni a presentar el pasaporte sanitario en restaurantes tras el fin de la mayoría de restricciones. El uso del cubrebocas se mantiene únicamente en transportes públicos y en centros de salud. En estos últimos, también deberá presentarse el certificado de vacunación. En cuanto a la expansión de BA.2, –la apodada como ‘sigilosa’, aunque sí que se detecta a través de una PCR–, el Ministerio de Sanidad, en la última actualización de su informe Evaluación rápida del riesgo, fechado el 11 de marzo, considera que pese a la predominancia aún del linaje BA.1 –Ómicron original–, es muy probable que el BA.2 se convierta en dominante en España en las próximas semanas, tal y como ha ocurrido ya en otros países.
BA.2 será dominante pronto
Este linaje –agrega Sanidad– presenta numerosas diferencias en el perfil de mutaciones respecto a BA.1, lo que podría conllevar cambios en el comportamiento del virus. De acuerdo con las primeras evidencias, BA.2 parece ligeramente más transmisible que BA.1, el grado de escape a la respuesta inmune es similar en ambas y la infección previa por Ómicron proporciona un alto grado de inmunidad frente a la infección por BA.2. Hasta el momento no se han encontrado diferencias entre los dos linajes respecto al riesgo de hospitalización y enfermedad grave.
La probabilidad de que BA.2 se imponga al resto de linajes circulantes en este momento se considera muy alta. A fecha de 25 de febrero de 2022 en el sistema de información de la Red Nacional de Vigilancia epidemiológica (SiViEs) el número de casos secuenciados de BA.2 era de 176. El porcentaje de BA.2 entre las muestras secuenciadas aleatoriamente en la semana 6 de 2022 (del 7 al 13 de febrero) es del 8%.
«BA.1 y BA.2 tienen algunas diferencias genéticas, lo que puede hacerlos antigénicamente distintos. Se ha documentado la reinfección con BA.2 después de la infección con BA.1; sin embargo, los datos iniciales de los estudios a nivel de población sugieren que la infección con BA.1 brinda una protección sustancial contra la reinfección con BA.2», detalló la Organización Mundial de la Salud la semana pasada.