El Kremlin asesina en Kiev a una periodista rusa opositora
Oksana Baulina, de ‘The Insider’, trabajó para Navalni y era muy crítica con Putin
La periodista rusa Oksana Baulina probablemente era consciente desde hace tiempo de que su vida corría grave peligro. Nacida hace 42 años en el distrito de Krasnaya Presnya, en las afueras de Moscú, era muy crítica con el régimen de Vladímir Putin y llevaba años investigando la corrupción en el seno del Kremlin. De hecho, empezó a trabajar en 2017 para el opositor Alexei Navalni, en su Fundación Anticorrupción –cuyo objetivo es la investigación de los tejemanejes de funcionarios, autoridades y empresas rusas controladas por el Estado–.
Baulina tuvo que marcharse de Rusia en 2021 cuando la entidad fue declarada organización extremista y Navalni fue encarcelado. Pero no se rindió y siguió investigando trapos sucios del Kremlin para el medio opositor ‘The Insider’. Se encontraba en Kiev como enviada especial grabando imágenes de la destrucción provocada por las tropas rusas en un centro comercial en el distrito Podilski cuando un proyectil acabó con su vida. Durante la jornada de ayer circularon fotos en las redes sociales del supuesto vehículo que ocupaba la reportera en el momento del impacto. El hecho de que el coche estuviera reventado y no hubiera rastro de otros impactos en los alrededores sugiere que fue un ataque de precisión y que sus enemigos la tenían perfectamente localizada.
La cuenta oficial de Navalni en Twitter publicó un hilo en el que se glosaba la figura de Baulina, recordando su compromiso por el periodismo independiente. «Los ladrones y bandidos del Kremlin, contra los que luchó, la mataron, igual que han matado a muchos otros en esta guerra criminal», dice uno de los tuits.
Agente extranjero
‘The Insider’, especializado en periodismo de investigación, verificación de datos –ha destapado casos de noticias falsas fabricadas por la propaganda rusa– y análisis político, es uno de los medios rusos declarado como ‘agente extranjero’ por recibir financiación del exterior, y, por lo tanto, vive bajo el asfixiante escrutinio del Kremlin.
En el ataque en el que perdió la vida Oksana Baulina también murió otro civil; dos personas que acompañaban a la periodista resultaron heridas y hospitalizadas, según ha detallado ‘The Insider’, que ha extendido sus condolencias a los familiares y amigos de la reportera, que estuvo en Leópolis y Kiev informando de la guerra en Ucrania, informa Ep.
La ONG Reporteros Sin Fronteras (RSF) se ha hecho eco de la noticia y ha señalado en su perfil oficial de Twitter que «los periodistas no deben ser objetivos de guerra», mientras que la Federación Europea de Periodistas (EFJ) también ha condenado el «bombardeo de objetivos civiles por parte del Ejército ruso».
Ataques deliberados
«Algunos periodistas son atacados deliberadamente con la clara intención de intimidar a toda la profesión, lo que constituye un crimen de guerra. A otros les disparan en áreas residenciales con múltiples víctimas civiles», ha dicho el secretario general de la EFJ, Ricardo Gutiérrez, que ha añadido que estas acciones «no pueden quedar impunes».
El Sindicato Nacional de Periodistas de Ucrania (NUJU) ha confirmado el fallecimiento de Oksana Baulina, la sexta periodista en morir desde que comenzó la invasión rusa en Ucrania, según recoge la EFJ en un comunicado en su página web.
Los otros cinco nombres son Yevhenii Sakun, un camarógrafo ucraniano muerto el pasado 1 de marzo durante un ataque a la torre de televisión en Kiev; el periodista ucraniano Víktor Dedov, abatido el pasado 11 de marzo en Mariúpol; el periodista estadounidense tiroteado en Irpín, Brent Renaud; y el camarógrafo de la cadena de televisión Fox News Pierre Zakrzewski y la periodista ucraniana Oleksandra Kuvshinova, muertos en Kiev.