La UE pospone las principales propuestas de Sánchez sobre gas y electricidad
∑El Gobierno español deberá adoptar alguna de las 14 medidas que tiene preparadas a la espera de la decisión que apruebe hoy el Consejo Europeo
El Consejo Europeo que comenzó ayer en Bruselas, el más importante en muchos años, deberá decidir hoy qué medidas pueden adoptar los Estados para hacer frente a la espectacular subida de los precios del gas y de la electricidad. La disparidad de intereses entre los países hace casi imposible que se alcance una unanimidad a pesar de, por ejemplo, la intensa actividad desarrollada por el presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, para intentar convencer a otros gobiernos con sus propuestas.
Sin embargo, las dos principales medidas sugeridas por Sánchez no han sido consideradas como esenciales y han quedado relegadas. Así sucede con su intención de modificar el sistema de fijación de los precios de la electricidad en el mercado mayorista, en el que el gas y sus elevados costes determina al alza el precio final de la electricidad.
Aunque son muchos los países que están de acuerdo en que los mercados mayoristas de electricidad necesitan una revisión, tal y como se ha puesto de manifiesto en las últimas semanas, la Comisión Europea ha decidido esperar al informe de la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía (Acer) que presentará en abril.
Pero Europex, la asociación europea de mercados eléctricos, ha hecho un llamamiento a la Comisión Europea para que «se asegure de que cualquier medida de apoyo diseñada para ayudar a los consumidores a superar esta situación sin precedentes no ponga en riesgo los éxitos y la eficiencia del diseño de mercado existente». La Comisión Europea también ha dicho que podría producirse «una distorsión de la competencia y una perturbación del mercado».
La otra gran apuesta de Pedro Sánchez, el desacoplamiento del coste del gas del precio final de la electricidad en el mercado mayorista, tampoco ha sido considerada como urgente por la Comisión Europea. Las distorsiones que podría provocar esta medida en un sector tan regulado han provocado recelos en Bruselas y, sobre todo, en Alemania. La propuesta española podría salvar los muebles si se limitara el precio del gas en el mercado mayorista de electricidad, solución que también despierta dudas legales. Se trataría de topar el precio de la electricidad generada por las centrales de ciclo combinado de gas.
Mecanismo de compensación
La limitación del precio de la generación de los ciclos combinados debería ir acompañada de un mecanismo de compensación que sería asumido por el propio sistema gasista.
Esta es una de las 14 medidas que ha preparado el Ministerio para la Transición Ecológica, alguna de las cuales aprobará la próxima semana el Consejo de Ministros en función de las propuestas que haga hoy el Consejo Europeo. Hay que recordar que varios miembros del Gobierno han asegurado en las últimas semanas que se adoptarán medidas urgentes aunque Bruselas no adopte ninguna resolución de forma unánime.
Otra de las propuestas se centra en sacar la tarifa regulada o pvpc de la electricidad del mercado mayorista, tal y como sucede en el resto de los países europeos. Esta situación encarece la factura de la luz de unos 11 millones de pequeños consumidores y pymes en España.
El departamento de Teresa Ribera también ha vuelto a poner sobre la mesa su vieja intención de recortar los denominados ‘beneficios caídos del cielo’ de las centrales hidráulicas, nucleares y algunas renovables. En este tema, la ministra tuvo que dar marcha atrás hace unas semanas después de aprobar un decreto que suponía un recorte en los ingresos de las principa
les eléctricas de unos 2.000 millones de euros. Sin embargo, estas compañías demostraron que el 90% de la energía que venden en el mercado mayorista responde a contratos a largo plazo, bilaterales, y con precios muy inferiores a los actuales. En concreto, a un precio medio de 50 euros el megavatio hora (MWh) en 2021, cuando ahora está por encima de los 250 euros.
Pero Ribera cree que sí que podrían detraer los beneficios extras obtenidos por las eléctricas con los contratos bilaterales cerrados en las últimas semanas o meses, en plena ola de subidas.
Impuestos del gas
Otra propuesta, que en este caso es competencia del Ministerio de Hacienda, es la de establecer una rebaja de los impuestos del gas, tal y como se ha hecho con la electricidad. No obstante, la tarifa regulada del gas fue topada hace unos meses, aunque la diferencia no será a fondo perdido, sino que los consumidores la irán pagando en los próximos meses.
Lo que ha quedado descartado es la pretendida fijación, junto con Portugal, de un precio máximo de la electricidad en 180 euros el MWh en el mercado ibérico, dado que no estaría bien vista por Bruselas, ya que obligaría a cerrar las interconexiones con Francia. Además, nuestro país contaría con una electricidad más barata que sería adquirida por Francia y otros países europeos, produciéndose una situación peculiar: los consumidores españoles asumirían los costes de esa limitación mientras que el resto de países obtendrían energía barata.