Borràs manipula el reglamento del Parlamento catalán y expulsa a un diputado de Cs
El caso Pegasus entró ayer con fuerza en el Parlamento de Cataluña. Antes de la sesión de control al Govern, la presidenta de la cámara, Laura Borràs, leyó la declaración de la Junta de Portavoces, aprobada el pasado 21 de abril por los representantes de ERC, Junts, los comunes y la CUP, en la que se critica el espionaje a unos sesenta líderes políticos independentistas, entre 2017 y 2020, y, entre otras cosas, también se exige al Gobierno que asuma su responsabilidad en el ‘affaire’. Borràs manipuló el reglamento parlamentario para defender su lectura en el pleno y expulsó al diputado de Cs Matías Alonso, que criticó, sin tener la palabra, la maniobra.
La declaración de la Junta de Portavoces del día 21 no se aprobó por unanimidad, por lo que no consiguió el carácter de ‘declaración del Parlamento de Cataluña’, que necesita de la unanimidad de los miembros de la Junta de Portavoces y se publican en el Boletín Oficial y se leen en el pleno o la comisión correspondiente. Así consta en el artículo 169 del reglamento, que distingue entre ambas declaraciones.
Sin embargo, al iniciarse la sesión plenaria de este miércoles, Borràs leyó la declaración aprobada la semana pasada. Tras su lectura, Nacho Martín Blanco (Cs) pidió la palabra para afear a la presidenta el uso partidista de su cargo y el incumplimiento de la norma, pero Borràs no permitió ni tan solo la protesta. Fue entonces cuando Alonso, compañero de filas de Martín Blanco y uno de los diputados autonómicos más veteranos del Parlamento catalán, sin pedir la palabra, criticó la decisión de la presidenta y recordó que no podía ampararse en el artículo 169 para leer una declaración de la Junta de Portavoces.
«Unanimidad»
Tras llamarle al orden en tres ocasiones, Borràs expulsó al diputado de Cs y, mientras Alonso abandonaba el hemiciclo, procedió a leer el artículo 169.2 del reglamento para defender su decisión.
Pero la sorpresa fue que Borràs manipuló este punto del reglamento a la hora de recitarlo y omitió la palabra «unánimemente» del artículo en cuestión, que hace referencia a la necesidad de que la declaración de la Junta de Portavoces sea adoptada por todos sus miembros, además de la Presidencia, para que se considere declaración de la cámara y pueda ser leída en el pleno.