Gastos electorales como soborno a petición de cargos socialistas
Uno de los informes de la Fiscalía Anticorrupción incluidos en el sumario de Azud constata que Jaime Febrer, pagó «gastos electorales» en Xixona, Burjassot y Benicàssim como parte de los sobornos para conseguir contratos públicos, tal y como le habrían solicitado José Luis Vera, Pepe Cataluña y Rafael Rubio. Los dos últimos fueron suspendidos de militancia y el PSOE les abrió expediente.
El Ministerio Público pone el foco en la «evidente relación» y los «contactos mantenidos» entre Febrer y Cataluña «durante las fechas cercanas al periodo electoral». Se da la circunstancia de que el portavoz socialista en las Cortes Valencianas, Manolo Mata, ejerce la defensa del promotor en esta causa. El rastro de todos ellos lleva a los investigadores a una comida celebrada en un restaurante de Valencia en septiembre de 2005.
Febrer pagó a Vera 150.000 euros por organizar un encuentro con Rubio y Cataluña para eliminar cualquier escollo que pudiera afectar a una beneficiosa operación inmobiliaria con la que quería hacerse con tres parcelas municipales de uso residencial a cambio de pagar una deuda millonaria del ayuntamiento. Rubio, en la oposición, había denunciado en los medios que una de las mercantiles de Febrer había recibido información privilegiada del consistorio. En los meses posteriores a ese encuentro, la instructora advierte «un incremento patrimonial no justificado de 193.000 euros» en las cuentas del dirigente socialista. Además, consta que abrió una caja de seguridad en un banco en 2007.