Aleix se calienta con Márquez
▶ El mayor de los Espargaró, tercero en Jerez y segundo del Mundial de Moto GP, carga contra el pilotaje agresivo de Marc, que responde: «Se queja por todo»
En una carrera dominada de principio a fin por Pecco Bagnaia y Fabio Quartararo, uno de los pocos alicientes estaba en ver quién completaba el cajón. Una lucha que emprendieron Aleix Espargaró, Marc Márquez y Jack Miller. Jaleaba Jerez, lleno a rebosar (58.132 espectadores) por primera vez desde la nueva normalidad y disfrutaba con un final de carrera en la que los tres pilotos fueron alternando sus posiciones. Al final fue Aleix el que entró tercero, lo que le sirve para colocarse segundo en el Mundial tras la desastrosa carrera de Rins. «Este podio para mí es aún más emocionante que el de Argentina, porque llevo compitiendo aquí desde pequeñito y nunca lo había conseguido, así que conseguirlo hoy, a los 32 años, batiéndome con los mejores pilotos del mundo, es súper emotivo», relató el mayor de los Espargaró.
También estaba feliz Marc Márquez, cada vez más cerca de su mejor versión. Adelantó a Miller en el último giro e incluso salvó una caída de la manera que lo hacía antes de lesionarse en 2020. «He luchado esta cuarta plaza como si fuera una victoria. No son objetivos muy optimistas sino realistas, porque de esta manera no hay frustración», aseguraba el catalán de Honda, que lanzó sus guantes a la grada.
Gran balance de los dos pilotos españoles que no esconde la rivalidad que viven dentro y fuera de las pistas. Si en carrera se tocaron en la salida (Aleix no eludió el contacto) y pelearon el podio, en la sala de prensa también se desafían. Fue un fin de semana caliente para ambos que se inició el viernes tras una acción al final del segundo entrenamiento libre. Las cámaras recogieron los aspavientos del de Granollers después de que Márquez hubiera seguido su rueda. «Es increíble lo que está haciendo este tipo. Todos lo ven. ¿Es normal que un piloto que ha ganado tantos títulos pueda estar un minuto esperando a una Aprilia para seguirla? Es ridículo. Y es Marc Márquez. Mi cabeza no puede entenderlo», cargó Espargaró.
«Yo me sentía orgulloso»
Las quejas de Aleix, cuyo hermano comparte box en Honda con el de Cervera, no se quedaron ahí. Si en Portimao se las tuvo también con el pequeño de los Márquez, Álex, después de varios toques en la pista, no dudó en cuestionar el pilotaje del mayor. «Yo he cogido muchas ruedas, cien veces más que él, pero esperando en el ‘pit lane’. Pero todo el día en medio de la pista... Casi tira a mi hermano Pol, casi se chocan en la curva 13, casi tira a Remy Gardner, a Oliveira, a mí me ha molestado en la vuelta... A mí no me parece muy normal», insistió Aleix.
Sin querer polemizar en exceso, Márquez le respondió: «Es lo natural del motociclismo. Se queja por todo. No sé exactamente por qué se quejaba esta vez. No creo que tenga fijación. Creo que cuando yo estaba en esa posición, porque lo he estado, delante en el Mundial, yendo rápido y me buscaban rueda, me sentía fuerte, no me quejaba. Me sentía orgulloso de que me buscaran la rueda. Es normal si estás delante en el Mundial. Esto es motociclismo, ha pasado y siempre pasará».
Drama en el box del Pramac Racing con la caída de sus dos pilotos, Jorge Martín y Zarco. Especialmente dolorosa la del madrileño que se iba solo al suelo y acumulaba su cuarto cero en las seis pruebas disputadas. También Álex Rins sufría una salida de pista en la curva 12 y pasaba del 14º al 22º. Pero esta vez no hubo épica y el piloto de Suzuki no pudo remontar como hiciera la semana pasada en Portimao. Se quedó sin puntuar y perdió el coliderato que compartía con Fabio Quartararo.