Ayuso sugiere que saldrán conversaciones suyas y de líderes de la oposición, pero no de Sánchez
La líder madrileña asegura que «todo es posible» por la falta de transparencia
«Ahora mismo todo es posible». Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid irrumpió ayer en el debate sobre el espionaje detectado en los teléfonos de Pedro Sánchez y Margarita Robles con el ‘software’ de Pegasus para sugerir que en el futuro saldrán a la luz «conversaciones comprometedoras» de líderes de la oposición, tanto de PP, Ciudadanos y Vox, además de suyas propias y del presidente popular, Alberto Núñez Feijóo, pero no de Pedro Sánchez y miembros de su gobierno. En declaraciones a Es Radio y también en un acto organizado por Europa Press, Ayuso indicó que no descartaba que en el futuro aquellos que «somos alternativa, aparezcamos en los medios de comunicación con todo lujo de detalles mientras no se sabe del Gobierno absolutamente nada». La advertencia de Ayuso fue secundada por la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, que le dio la razón asegurando que en el PP ya están «acostumbrados al manejo de la información de manera selectiva» por parte del Gobierno. «Hay capítulos que hemos vivido no hace tanto que demuestran cómo utiliza la información el Gobierno, para atacar al PP y no para asumir responsabilidades», aseveró, para pronosticar que el PSOE puede utilizar «cualquier resorte para intentar atacar al PP».
Ayuso criticó a Sánchez también por la imagen negativa que se está trasladando de España a pocas semanas de la celebración de la cumbre de la OTAN en Madrid: «Yo me imagino todos los informes de los embajadores en Madrid diciendo a sus respectivos gobiernos: este país es de todo menos de fiar». En cuanto a si ella dará su teléfono móvil para que pueda ser analizado por si ha sido infectado con el sistema de espionaje Pegasus, la presidenta de la Comunidad de Madrid advirtió que ya es tarde: «Creo que a buenas horas ya. Creo que es mejor dejarlo estar». Ayuso afirmó que «ahora mismo todo es posible». De hecho y aunque admitió que nadie sabe ni conoce ninguna información sobre si se han espiado conversaciones de la oposición, apuntó que la «erosión de las instituciones es gravísima» por lo que «a estas alturas» se espera «cualquier cosa».
La debilidad del Gobierno
Por su parte, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, aseguró ayer que el «ataque» de Podemos exigiendo «responsabilidades políticas» a la ministra de Defensa, Margarita Robles, por el caso del presunto espionaje demuestra la «debilidad» del Ejecutivo de coalición. A su entender, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, debería «tomar decisiones» porque «los españoles no merecen vivir públicamente cómo el Gobierno se tira los trastos a la cabeza en directo». «Lo curioso es que sea el propio Gobierno el que ataca al Gobierno, en vez de estar buscando defender las instituciones», declaró ayer Gamarra en La Sexta.
La también portavoz del Grupo Popular en el Congreso señaló que este hecho evidencia que Sánchez lidera un Gobierno «absolutamente debilitado», en el que una parte del Consejo de Ministros «desacredita y cuestiona a la otra parte del Consejo de Ministros». «Debiera tomar decisiones el presidente del Gobierno porque no es lógico que un Consejo de Ministros no tenga una posición colegiada en relación con los asuntos de Estado», proclamó, para insistir en que el Ejecutivo está «en una debilidad extrema».
Al ser preguntada si la ministra de Defensa y la directora del Centro Nacional de Inteligencia, Paz Esteban, debería dejar su cargo para asumir responsabilidades por lo ocurrido, Gamarra defendió esperar a tener la información que les facilitará hoy la jefa del CNI en la Comisión de Secretos Oficiales para «extraer conclusiones» y ver si «tienen que asumir o no responsabilidades». «Pero no antes de tener acceso a esa información», advirtió.