Nadal inicia el despegue
El balear suma casi dos horas de vuelo en su estreno en Madrid, con altibajos, pero también brillanteces
Contento por el resultado y hasta bromista, Rafael Nadal comenzó ayer en el Mutua Madrid Open el despegue hacia sí mismo. Con un parón que afectó mentalmente porque cortó una racha extraordinaria, es el momento de encontrarse. Está ahí, con despistes pero también brillanteces ante Miomir Kecmanovic.
La lesión está bien, como pudo celebrar la grada, llenísima para ver al campeón de 21 Grand Slams. «No tengo molestias en la costilla; tuve al inicio de la semana, me hice un tac y la imagen era buena. Son otras cosas que hay que recuperar».
Porque hubo desajustes, tres dobles faltas, derechas que no mordían, pero todo fue ponerse a rodar. Un 61 en 34 minutos para calentar y un 76 (4) para forzar un poquitín más el cuerpo, para acercarse al Nadal de principio de curso. Dos fases del partido que también coincidió con jugar al aire libre primero y bajo techo cuando arreció la tormenta. Con los focos encendidos, hubo gestos de frustración, un ‘break’ cedido, pero también puños al alto, velocidad de piernas y la derecha cada vez más afilada. Incluso el saque pasó de 170 a 198 kilómetros por hora. Rodaje.
«Son automatismos que tienes que ir recuperando. Físicamente me cansaba un poco más de lo habitual. Voy un poquito a contrarreloj, pero no estoy preocupado. Cada minuto que paso en pista es positivo. Hora y 55 minutos con un rival de buen nivel es una victoria de mucho valor, me ayuda a mi objetivo: recuperar mi estado de forma cuanto antes», analizó el balear. Hoy, vuelve a escena en un superjueves en Madrid: NadalGoffin, Djokovic-Murray, Alcaraz-Norrie y semifinales femeninas.