Europa, sin gas; España, sin aliento
Conclusión. Lo que hace falta es una destitución/sustitución al frente de este Gobierno felón. Que decidan ellos mismos el término
TODO es pasajero. Y, en el durante, con incidencia mínima sobre los españoles. No hay por qué agobiarse. Consigna ‘made in Gobierno de España’. Del en cuanto pase «el uno o dos casos de Covid» saldremos más fuertes al «la inflación es un fenómeno temporal y nos intranquiliza entre poco o nada». Optimismo rayano en la alucinación, típico del Gobierno que nos ocupa pero parece que no nos preocupa al resto. ¡Ustedes verán!
En el mientras tanto, varios cisnes negros, esos acontecimientos extraordinarios e impredecibles, pero no imposibles, con un fuerte impacto social y económico. Y desde que está el señor Sánchez en el poder se nos acumulan. Pero lo peor, es que se están dando casi todos juntos en poco más de un año, algo que, estadísticamente, nadie espera, pero visto lo visto... pasa. ¡Vaya si pasa! El mismo Covid, el primero, y después desde el temporal Filomena, pasando por la erupción volcánica en La Palma, hasta llegar a la invasión de Ucrania. ¿Puede pasarnos algo más? Como no nos apresuremos a echar al cenizo que nos desgobierna ¡la invasión extraterrestre, a la vuelta de la esquina!
Y así andamos, como pollos sin cabeza, sin protestar, ni quien proteste por nosotros en la calle –¡para qué!, no ha lugar, ahora no claro, ya vendrán tiempos ‘populares’ más propicios, pensarán algunos que yo me sé–, en medio aún de las consecuencias del impacto de una guerra que ha fortalecido más si cabe la idea de una inflación desbocada que de temporal tiene mucho más de lo que esta vida nuestra convertida en una serie distópica más de Netflix. Le doy la razón al presidente del PP, Núñez Feijóo, cuando dice que no hay impuesto más injusto que una inflación que juguetea con el 10%, que afecta a todos por igual, y que habría que bajar impuestos para aliviar en algo la cada vez más dañada capacidad adquisitiva de los españoles. Pero no, para este Gobierno mejor esperar a que desde el BCE nos suban los tipos de interés y todos tan contentos... De hecho, hasta la presidenta de la autoridad monetaria ha confirmado que la primera subida prevista para finales de año casi que se va a producir en julio. ¿Solución o puntilla? Pues... para nuestro país más bien lo segundo. Y mientras Europa se queda sin gas, España –que se ofrece como alternativa para el resto de socios al corte de suministro del ídem desde Rusia–, se quedará sin aliento.
Y es que Sánchez se lo ha jugado todo a futuros, a la barra libre del endeudamiento y al largo me lo fiais. Ahora, la situación es bien distinta y la política de subida de tipos en EE.UU. y Europa amenaza con convertir en un infierno las cuentas públicas de España que el Gobierno ha llenado con los dineros que no tiene. Sánchez, en esto también, es un mal tipo. Conclusión. Lo que hace falta es una destitución/sustitución al frente de este Gobierno felón. Que decidan ellos el término.