Los museos estatales seguirán a medio gas otros cuatro meses más
▶ Los sindicatos exigen a Cultura celeridad para evitar que los cierres se perpetúen pese al pacto
Los museos dependientes de Cultura seguirán funcionando a medio gas –con cierres eventuales, salas limitadas o restricción de horarios–, según denuncian los sindicatos, pese al acuerdo alcanzado ayer con el Gobierno para reforzar las plantillas de estos centros. UGT, CSIF y CC.OO., los tres sindicatos implicados en la negociación, exigen a la Administración celeridad en los trámites y reclaman «contrataciones urgentes» para asegurar el correcto funcionamiento de los museos estatales, inmersos en la peor crisis de su historia.
Función Pública desatascó ayer la situación de los vigilantes de sala, que desde hace más de dos años vienen denunciando que el IV Convenio Colectivo les ha degradado de categoría y además impedía a los trabajadores temporales acceder a estos puestos por la titulación exigida. Unido a la carestía de personal de taquilla o porteros mayores, este es el motivo por el que museos estatales como el Arqueológico o el Sorolla solo pueden abrir sus salas a medias desde hace más de un año.
El texto aprobado mantiene la categoría E1 para los vigilantes fijos, con lo que quedan por debajo de taquilleros, porteros de sala y encargados de sala, que en el anterior convenio estaban encuadrados en el mismo nivel. A cambio, el Ejecutivo ha accedido a flexibilizar las condiciones de acceso para quienes se presenten a las próximas convocatorias de oferta pública de empleo. Había unos 500 trabajadores temporales que temían no poder opositar porque se les exigía una titulación que solo pueden estudiar los menores de 17 años.
Este acuerdo alcanzado en la comisión negociadora ahora debe remitirse a Trabajo, que tiene que aprobarlo y enviarlo al BOE, para su publicación por modificación de convenio. También deberían tramitarse las provisiones de puestos y costes que Cultura tiene que gestionar cuanto antes para que los apruebe Hacienda. En una nota de prensa difundida ayer, en la que rompió el laconismo de este último mes, el ministerio aseguró que prevé incorporar en el plazo de un mes porteros y taquilleros interinos, pero los sindicatos no saben nada de esto. El objetivo de Iceta es «garantizar la apertura de los museos en verano», aunque en este periodo seguirán faltando vigilantes, necesarios para la apertura total de los centros.
Derecho constitucional
«Cultura debe planificar sus recursos para que nunca se cierre un museo y la ciudadanía tenga el derecho constitucional a una cultura de calidad», señaló UGT. Su portavoz, Javier Figueroa, aclaró que en el mejor de los casos los puestos de vigilantes no se van a cubrir antes de septiembre. «Habrá un periodo de transición de al menos cuatro o cinco meses y, dependiendo de los museos, puede ser más grave o no, y puede que siga habiendo salas cerradas». CSIF exigió también «celeridad en los procesos de selección». CC.OO., por su parte, dijo que no tienen garantías de que los trámites vayan a ejecutarse a tiempo de llegar a la oferta de empleo público de 2020, que caduca en octubre. Según su portavoz, Vidal Cruzado, el encuadramiento de los vigilantes, por sí solo, no basta: hay que dotar de la plantilla necesaria a los taquilleros y personal de sala. Los sindicatos cifran en unas 120 las vacantes por cubrir.