Rusia toma Mariúpol y anuncia la destrucción de un importante lote de armas occidentales
Según el Kremlin, el equipamiento tenía como destino las tropas ucranianas en Donbass
La «operación militar especial» no se ha desarrollado según los planes del Kremlin. Hasta el aparato de propaganda ruso ha dejado ver, de forma un tanto edulcorada, ese fiasco. Sin embargo, sí puede anunciar la «victoria total» en Mariúpol tras la toma de Azovstal, símbolo de la resistencia ucraniana. Tras dos meses de asedio, sus combatientes han recibido la orden de rendirse. Ayer se distribuyeron imágenes en las que los militares rusos cacheaban a los evacuados de la planta metalúrgica, buscando también símbolos nazis en forma de tatuajes. Como respuesta a este duro contratiempo, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aseguró en una entrevista televisada que «todavía 700.000 defensores están luchando en todo el país».
Ataque con misiles
Rusia mantiene su acoso en el este de Ucrania tras declarar el viernes la «liberación total» de la emblemática ciudad situada en el litoral del mar de Azov. Tras resistir en precarias condiciones en el laberinto de túneles subterráneos de esta fábrica, el medio millar de combatientes ucranianos que quedaban allí depusieron las armas, según anunció el Ministerio de Defensa ruso. Desde el pasado lunes, un total de 2.439 combatientes se han rendido a las tropas de Moscú, terminando con el último reducto de rebeldía de Mariúpol, reducida a escombros.
El ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, comunicó al presidente Vladímir Putin «el fin de la operación y la liberación total del complejo [de Azovstal] y de la ciudad de Mariúpol», dijo un portavoz del Kremlin.
Por otra parte, el citado departamento anunció ayer que sus fuerzas destruyeron con misiles de largo alcance un gran cargamento de armas occidentales en el noroeste de Ucrania. «Misiles Kalibr de alta precisión
y largo alcance, lanzados desde el mar, destruyeron un gran lote de armas y equipamientos militares cerca de la estación de ferrocarril de Malin, en la región de Zhytómyr, enviado por Estados Unidos y países europeos», dijo el ministerio.
Agregó que las armas estaban destinadas a las fuerzas ucranianas en el Donbass, en el este de Ucrania, la región rusoparlante que ha estado parcialmente controlada por los separatistas prorrusos desde 2014 y que ahora es escenario de fuertes combates.