Italia señala a Canarias como el foco de la viruela del mono
▶ Sanidad investiga una fiesta en Maspalomas y Simón admite una transmisión «más alta de lo esperado»
El Ministerio de Sanidad investiga una fiesta multitudinaria celebrada en Maspalomas (Gran Canaria) recientemente como posible foco de transmisión de la viruela del mono en las islas. De los dos casos detectados en el archipiélago –que aún no han sido confirmados–, solo uno tiene vínculo con la fiesta celebrada en el sur de la isla grancanaria, y según aseguran fuentes sanitarias del Ejecutivo regional, es posible que el evento haya contribuido a la transmisión del virus, pero aún es pronto para saber cómo ha determinado la difusión. Sin embargo, animan a las personas con síntomas compatibles a que se pongan en contacto con el 112 para ser tratadas precoz y adecuadamente.
El Maspalomas Pride 2022 tenía previsto reunir a más de 200.000 personas durante los diez días en los que se extendían las celebraciones –del 5 al 10 de mayo–, a las que acuden en su mayoría hombres homosexuales llegados de todas partes del mundo. El pasado viernes la Consejería de Sanidad madrileña clausuró una sauna del barrio de Malasaña como posible foco de transmisión del virus en la capital.
Las alarmas internacionales saltaron cuando Italia empezó a indagar el origen de sus infecciones. En este país ascienden ya a tres las personas contagiadas con el virus. Los tres pacientes están ingresados en el Instituto Lazzaro Spallanzani de Roma, prestigioso centro especializado en enfermedades infecciosas. Se encuentran en condiciones definidas como «discretas», con las típicas vesículas en la piel que provoca la enfermedad.
Dos de los tres hombres habían hecho recientemente un viaje a las islas Canarias y el tercero había estado en Viena, donde tuvo, según ha comunicado a los médicos, entre 40 y 50 relaciones estrechas. Se sospecha que uno de sus contactos pueda estar relacionado con el foco del brote de la viruela del mono surgido en el archipiélago canario. En todos los medios italianos se apunta directamente a la macrofiesta canaria como origen del brote, a pesar de que desde el Ministerio de Sanidad español evitaron ayer a este periódico hacer una valoración al respecto.
El director del Instituto Spallanzani, Francesco Vaia, señaló que no existe relación entre los tres pacientes italianos. Un equipo de ‘cazadores de virus’ del instituto Spallanzani trabajan para registrar los contactos estrechos de los tres pacientes, respetando la privacidad: «Se trata de contactos con al menos 30 personas», dijo el consejero de Sanidad de la región del Lazio, Alessio D’Amatto. «Esperamos que haya otros casos en los próximos días», explicó Massimo Andreoni, director científico de la Sociedad italiana de enfermedades infecciosas.
Rodeado de polémica
En Italia se ha creado una notable polémica por unas manifestaciones realizadas desde el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC), al apuntar que el primer foco del brote de transmisión humana de la viruela del mono se habría producido «en una comunidad cerrada de hombres que tienen sexo con otros hombres». Han sido suficientes estas palabras para que surgiera el temor de que aflore una campaña de homofobia. También un conocido virólogo italiano, Matteo Bassetti, se refirió al colectivo homosexual masculino como «el primer lugar de contagio».
Para evitar crear un estigma, como ocurrió en los años 80 con el virus del sida, los expertos italianos están muy atentos a no hablar de infección sexualmente transmisible en la viruela del mono. Así lo explica Andrea Antinori, director médico del Instituto Spallanzani: «La epidemiología de esta enfermedad nos dice que se transmite a través de contactos estrechos. Los sexuales lo son por definición, pero no son los únicos posibles. De momento, por tanto, parece prematuro definirla en el sentido estricto de una enfermedad transmisible sexualmente». «Sobre todo –añade Antinori– diría que se evite identificar esta enfermedad con el grupo de personas de hombres gais, ya que esto podría crear un estigma hacia esta población. También hay otras personas que se ven afectadas, es una enfermedad que se transmite esencialmente a través de gotitas de saliva y contactos estrechos».
En España, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, matizó sus propias palabras y admitió ayer que la transmisión de la viruela del mono entre humanos está siendo «más alta de lo esperado». Según dijo durante la I Jornada Nacional ‘Cómo protege la profesión veterinaria la salud del planeta?’, «la precaución tiene que existir siempre» y se debe dar tiempo a que se lleven a cabo las investigaciones correspondientes y «valorar correctamente el riesgo».
Más casos de lo esperado
Simón también dijo que durante la pandemia del Covid-19 no se ha trabajado solo con el coronavirus, sino también con otros riesgos y con otros patógenos que han ido apareciendo. «Ahora ha surgido uno, en particular, que hasta ahora estaba suscrito a unas zonas concretas de África Occidental, no a toda África», aclaró.
Desde su punto de vista, la viruela del mono «es un problema de origen africano y en Europa se conocían básicamente casos importados y alguna pequeña transmisión local en algún país, en concreto el Reino Unido ha tenido en los últimos años algunos casos importados. A partir de esas importaciones parece ser que ha habido una transmisión en humanos que ha sido más amplia de lo esperado».
«La amplitud no se evalúa únicamente por el número de casos. Este es importante porque hay más de los que ha habido nunca fuera de África, pero no es lo mismo si todos los casos tienen un punto único de transmisión o si son varias las cadenas de transmisión. Todo eso se está investigando, hay que dar margen para hacer las investigaciones adecuadas y valorar correctamente el riesgo», explicó a los medios presentes ayer en la jornada celebrada en Zaragoza.