«El Madrid está ligado al poder y el Barça al sentimiento»
Josep Maria Casanovas. Fundador y exeditor del diario ‘Sport’
—El periodismo deportivo.
—Se ha trasladado en gran medida a las redes sociales, donde no prima la información sino el ‘link’, el impacto. Gana el que más grita, el que dice la mayor estupidez. No hay criterio.
—En Barcelona, la prensa deportiva es especialmente cobarde, tanto en las redes como en el papel.
—Porque temen que si son críticos les llamen antibarcelonistas. Si eres valiente no te lo agradece nadie. Con lo de Piqué y Rubiales hemos pasado de puntillas, y a Bartomeu no le hemos pedido responsabilidades por cómo dejó el club.
—Miedo a perder las subvenciones.
—No. Lo que importa es el sentimiento. El Madrid es un club ganador, y la prensa de Madrid se enfada cuando el Madrid no gana. El Barça es un club luchador, y el que no arrima el hombro, o el que dice la verdad cuando duele, se considera un traidor.
—La prensa de Madrid es más dura.
—El Madrid está ligado al poder y el poder es ganar siempre. El Barça está ligado al sentimiento. Florentino este año se ha atrevido a ir de frente contra la UEFA con la Superliga, y ahí está el Madrid, en la final de la Champions. Ni árbitros ni mano negra. El Madrid encarna mejor que nadie el poder y nadie se atreve a toserle.
—Guardiola.
—Muchos amigos míos quieren que el Madrid pierda siempre, y muchos madridistas se alegraron del batacazo de Pep porque a veces da la sensación que cree que inventó el fútbol.
—Florentino, Laporta.
—El presidente del Madrid es el presidente de una multinacional que factura 132.000 millones de euros. El anterior presidente del Barça, Bartomeu, tiene una pyme que factura 62 millones y al actual es mejor no preguntarle qué factura porque no factura nada. Florentino lleva 13 años y cuando hay elecciones no se presenta nadie, porque entre otras cosas es casi imposible tal como ha hecho los estatutos. Laporta lleva un año y ya veremos. El palco del Madrid es un centro de negocios y el Camp Nou es un salón de amigos.
—El Bernabéu. El Camp Nou.
—El fútbol ha cambiado. Hoy la gente no quiere estadios más grandes, sino que tiene la tele más grandes para ver el fútbol en su casa, más cómodo y tomando un gin-tonic. El Madrid como siempre lo entendió antes que los demás y el nuevo Bernabéu, en el centro neurálgico de Madrid, no será un negocio de 2 días a la semana sino de 365 días al año. El Barça todavía tiene que empezar.
—Nosotros «som més que un club».
—En 2022 no tiene ningún sentido que algunos clubes sigan siendo sociedades limitadas. El primer Bernabéu se hizo con el dinero de los bancos españoles y el de los socios del Madrid, igual que el primer Camp Nou. El nuevo Bernabéu se ha hecho con el dinero de GP Morgan y el nuevo Camp Nou se hará con el dinero de Goldman Sachs. El Barça acabará con una deuda de 3.500 millones. Los socios, por muy propietarios que se sientan del club, no lo pueden pagar. Lo que el Barça recauda en abonos es el 12% del presupuesto, y 25.000 socios en excedencia por el Covid que no han renovado sus carnés.
—El modelo.
—Es imposible competir con clubesestado con presupuestos de 1.000 millones. El modelo es el Bayern, que el 51% es todavía de los socios, pero el 49% es de cuatro multinacionales que son las que dirigen el club, ponen a los ejecutivos y elaboran los planes de negocio. No tiene ningún sentido funcionar con presidentes que se hipotecan por 20 años y duran 4.
—La crisis deportiva del Barça.
—Es reversible con dinero. Sin dinero es imposible. Y fichando en serio. Con jugadores que llegan con la baja en el bolsillo o que tienen 34 años los resultados serán los que son.
—Las vacas sagradas podrían bajarse el sueldo.
—Ningún jugador del Barça se ha bajado el sueldo. A lo sumo lo aplazaron. No esperes generosidad de un futbolista. Son muy egoístas
—Sangraron al club.
—Bartomeu era blando y ellos se aprovecharon.
—Florentino no lo permitió.
—Echó a Ramos y a Cristiano. Te doy un dato revelador. En su última temporada, Sergio Ramos cobraba 11 millones netos. Hoy Busquets cobra 18.
—Haaland, Mbappé.
—Al Barça le falta un icono. Lewandowski es de otro nivel. Pero nos asegura uno o dos años los 30 goles que marcó Messi en su última temporada en el Barça.