El presidente de Perú, citado a declarar ante la Fiscalía por corrupción
➤Pedro Castillo denuncia una «persecución política» en su contra
El 13 de junio, el presidente de Perú, Pedro Castillo, deberá responder a la Fiscalía por la presunta comisión de delitos de organización criminal, tráfico de influencias y colusión agravada, un hecho que no ocurría desde 1993. Desde hace más de cien días, Castillo no ofrece ninguna declaración a la prensa, solo se comunica con los peruanos a través de encendidos discursos donde denuncia que hay una «persecución política» en su contra.
«Hoy en día se ha desatado una persecución política irracional a mi persona, al presidente de la República. No solamente al presidente, sino a diferentes ministerios, ¿y el resto de gestiones? ¿Y los demás presidentes de la República? ¿Y los demás ministros fueron santos?», dijo Castillo, al tiempo que añadió, «son 200 años de vida republicana y recién viene siendo escuchada la voz del pueblo».
Además, la Fiscalía citó ayer al exministro de Transportes, Juan Silva, por la entrega de varias obras en el conocido caso Tarata a una empresa a cambio del pago de dinero, según señaló el empresario Zamuel Villaverde, quien busca ser colaborador eficaz y ha entregado documentos y audios donde implica también al exsecretario del Palacio de Gobierno, Bruno Pacheco.
La semana pasada, el fiscal de la nación, Pablo Sánchez abrió la puerta para investigar a un presidente en ejercicio al reinterpretar el artículo 117 de la Constitución peruana que señala que «el presidente de la República sólo puede ser acusado, durante su período, por traición a la patria; por impedir las elecciones presidenciales, parlamentarias, regionales o municipales; por disolver el Congreso».
Investigado pero no acusado
Para el fiscal, el mandatario peruano puede ser investigado mientras ejerce la Presidencia pero no puede ser acusado, un hecho que puede suceder o no cuando Castillo deje de ser jefe del Estado. El diario ‘La república’ confirmó que existe un audio presentado ante la Fiscalía que es protagonizado por el exministro de Transportes y Comunicaciones, Juan Silva y el empresario Zamir
Villaverde, quien representa a varias empresas chinas y busca obtener licitaciones a cambio de pagos a Silva. Según este medio, entre agosto y diciembre de 2021, período en el que Juan Silva y Villaverde tuvieron reuniones comerciales, las empresas que promovía Villaverde obtuvieron siete proyectos cuyos montos ascendieron a 205 millones de euros.
«Cien grandes»
En la transcripción que tiene la Fiscalía, Villaverde le dice al exministro Juan Silva que «los amigos de Tapusa (empresa) le han mandado un presente para usted. Cien grandes para usted. Este es un pequeño –aún no cobran nada–, pero es un presente de buena señal, ¿no? Es la primera que me han mandado de Tarata. Me lo han enviado con todo y maleta. Esta es la primera gestión que hemos logrado».
El empresario Zamir Villaverde, el exministro Juan Silva, el ex secretario general del Palacio de Gobierno, Bruno Pacheco; el presidente Castillo y tres de sus sobrinos son investigados por la Fiscalía por los presuntos delitos de lavado de activos, corrupción de funcionarios y colusión agravada.
Menos de un año después de asumir la Presidencia, Castillo afronta su momento más difícil porque el que era su entorno directo –que ahora no puede tener ningún contacto con él– es investigado y varios de ellos están prófugos de la justicia, como su su ex brazo derecho, Bruno Pacheco, y sus sobrinos Fray Vásquez Castillo y Gianmarco Castillo Gómez. La Policía ha pedido sendas recompensas para encontrar el paradero de Pacheco y los dos sobrinos del mandatario.