‘Happy hour’ en el aeropuerto
O había gente o no había. Se ve en pantalla. El Gobierno dice que no
EL Gobierno e Iberia no se ponen de acuerdo en si hay mucha cola o poca cola en los controles del pasaporte de los aeropuertos españoles. Lo que confirma, primero, que el Gobierno discute menos con las aerolíneas quebradas que con las que funcionan. Segundo, que no tenemos bastantes cámaras de seguridad en zonas delicadas. Un área de posible aglomeración en un aeropuerto lo es. Tanta infraestructura y resulta que dejamos puntos ciegos. Para aclarar el entuerto debería bastar con acudir a las cámaras de seguridad. A ver: rebobina la cinta. Aquí está. Hay 30 británicos. No, 3.000. Cuando son cosas de contar, no entiendo tantas contradicciones. O había gente o no había. Se ve en pantalla. El Gobierno dice que no. Iberia cuantifica en 15.000 los pasajeros que han perdido sus vuelos desde marzo porque no hay bastantes agentes de Policía para que la cosa vaya ágil. 15.000 personas. Seis veces los habitantes de mi pueblo. Allí no tenemos cámaras de seguridad –y eso que somos zona fronteriza, en concreto entre Albacete y Murcia–, pero todos sabríamos cómo verificar y cuantificar, con fiabilidad, cualquier cola excesiva si se produjera por alguna razón en algún punto municipal.
Luego está lo del turismo. Se viene usted, digamos, ciudadano británico –nuestro principal mercado emisor es ahora extracomunitario y requiere pasaporte– a pasar unos días a España. Igual compró el billete huyendo de las aglomeraciones del Platinum Jubilee de la Reina Isabel II y se encuentra en el aeropuerto con otra marabunta, pero sin fiesta. Para matar el tiempo llama a un amigo, el pobre, que no ha podido venir: Hi, Peter, ¿qué tal? Peter cuenta que está en Londres, disfrutando del fiestón, viendo pasar a Kate Moss en el bus con otros iconos ‘british’ de los 90. Y tú, gastando tu fin de semana en una cola para sellar el pasaporte. Cuelgas, más cabreado aún y agradeciendo no haberle hecho una videoconferencia. Enseguida subes un vídeo a Twitter, una foto a Instagram… Los tabloides tienen más información: «Colapso total», publican.
Aunque niega los titulares, el Ministerio del Interior se ha comprometido a aumentar la plantilla policial en los aeropuertos. Se espera el mejor verano de nuestras vidas: el primero tras las restricciones. Y aquí, ya saben, vivimos del turismo. Miren si lo sabemos que tanto Turespaña como las comunidades autónomas gastan millones y millones de euros en promoción cada año. Anuncios, ‘influencers’, acuerdos con aerolíneas… Pero aquí también rige el boca a boca. ¿Qué tal aquella escapada a Mallorca?
Cuando uno sale de vacaciones es muy consciente de dos cosas: de su tiempo y de su dinero. Decían los hosteleros mallorquines que el británico se gasta lo que lleve en el bolsillo –suele ser norma del turista que cambia moneda–. Pero, claro, si hay tiempo... A este paso, habrá que instalar barras en los aeropuertos. Con ofertas. ‘Happy hour’ en hora punta de control de pasaporte. Aunque igual no es buena idea, porque entonces... habrá que poner más Policía.