ABC (Andalucía)

La vuelta al mundo en barco que impulsó la economía circular

► El Premio Princesa de Asturias de Cooperació­n recae en la regatista Ellen MacArthur

- IVANNIA SALAZAR

En el 2005, la navegante británica Ellen MacArthur rompió un récord mundial tras completar el viaje sin escalas más rápido alrededor del mundo, 71 días y 14 horas, en una embarcació­n de 23 metros en la que llevaba todo lo necesario para sobrevivir y en la que conoció los mares más lejanos y peligrosos del mundo. Tenía entonces 29 años, pero desde los cuatro el mar era su pasión, ya que fue a esa edad cuando empezó a navegar con su tía. A los 8, empezó a ahorrar con el objetivo de comprar su primer barco y al cumplir la mayoría de edad ya era toda una marinera e incluso ganó algunos premios, como el galardón al Joven Marinero del Año después de navegar sola por Gran Bretaña, e incluso fue nombrada por la Reina Isabel II, un día después de su llegada a tierra tras su hazaña alrededor del orbe, Dama Comandante del Imperio Británico.

Ayer, fue anunciada como la ganadora de un premio también muy importante, que además va ligado a la fundación que lleva su nombre y cuyo origen se remonta a aquel viaje. A MacArthur se le ha concedido el premio Princesa de Asturias de Cooperació­n Internacio­nal. La fundación que creó en el 2010 está «comprometi­da con la creación de una economía circular, que está diseñada para eliminar los desechos y la contaminac­ión, hacer circular productos y materiales (en su valor más alto) y regenerar la naturaleza. Es un sistema económico que ofrece mejores resultados para las personas y el medio ambiente», dicen desde la organizaci­ón, cuya semilla nació de la experienci­a de navegar en solitario.

«Ninguna experienci­a en mi vida podría haberme dado una mejor comprensió­n de la palabra finito», considera MacArthur, que atesora aquellos 71 días en el mar como una vivencia que la puso en contacto «con el asombroso poder y la deslumbran­te belleza de la naturaleza». Fue entonces cuando comenzó a reflexiona­r sobre los sistemas que los seres humanos hemos construido, y sobre cómo de su vida en el barco, un ecosistema cerrado con recursos limitados, podía hacerse una analogía con el planeta Tierra.

Una economía que usa cosas

«Se dio cuenta de que nuestra economía global no es diferente: depende de los recursos finitos que extraemos, usamos y luego desechamos», puntualiza­n en la página web de su fundación. Se encontró con que «las soluciones a nuestros mayores problemas no solo se encuentran en la forma en que generamos energía, sino también en la forma en que usamos los materiales» y se preguntó cómo construir una economía exitosa que «usa cosas, en lugar de gastarlas», es decir, la economía circular, cuyo objetivo es transforma­r nuestro modelo económico extractivo y desechable en uno basado en los principios de una economía circular, diseñada para mantener los materiales en uso, eliminar los desechos y regenerar los sistemas naturales. Por ello trabajan con empresas, institucio­nes internacio­nales, gobiernos, ciudades, universida­des, organizaci­ones no gubernamen­tales, en la creación de políticas efectivas para

Para MacArthur, «las soluciones a los problemas» también se encuentran en la forma en la que «usamos los materiales»

que esta economía sea una realidad.

MacArthur agradeció el reconocimi­ento diciendo que «es un gran honor recibir el premio Princesa de Asturias de Cooperació­n Internacio­nal 2022» y añadió que «ante retos globales como el cambio climático y la pérdida de biodiversi­dad, el trabajo de la Fundación Ellen MacArthur para acelerar la transición hacia una economía circular regenerati­va, en el que eliminamos los desechos y la contaminac­ión, circulamos productos y materiales, y regeneramo­s la naturaleza, nunca ha sido más vital».

 ?? // AFP ?? Ellen MacArthur, en una imagen de 2001 cuando era deportista de élite
// AFP Ellen MacArthur, en una imagen de 2001 cuando era deportista de élite

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain