Schwartzel, primer millonario del LIV
►El sudafricano gana en Londres y triplica su premio del Masters de 2011
Charl Schwartzel no es un cualquiera. El sudafricano (37 años) cuenta con quince victorias internacionales en su haber, entre ellas un grande, el Masters de Augusta. Por supuesto que la chaqueta verde de 2011 fue el momento culminante de su carrera tanto por lo valioso del torneo como por el importe del cheque conseguido (1.440.000 dólares), el más alto de toda su carrera; sin embargo, esta cantidad quedó ayer ridiculizada por la embolsada en solo tres rondas de golf en el nuevo circuito LIV Golf. Gracias a su triunfo en el invitacional de Londres sumó cuatro millones más a su saneada cuenta corriente y no pudo evitar emocionarse en el hoyo 18. «Esto es increíble, tengo la sensación de estar viviendo un momento histórico para el golf mundial», declaró el sudafricano una vez que hubo amarrado el primer título de los siete que se pondrán en juego en este 2022 en la Superliga saudí. Poco le importaba en ese momento que el PGA Tour le hubiera impedido jugar en sus pruebas en el futuro, al igual que a otros quince jugadores (entre ellos Sergio García). El nivel deportivo exhibido en Centurion Golf le abrió las puertas al triunfo individual (comandó la clasificación de principio a fin) y también al colectivo. El equipo que formó con sus compatriotas Louis Oosthuizen, Hennie Du Plessis y Branden Grace se hizo con el primer puesto colectivo y cada uno de ellos con otros 750.000 dólares de premio.
Un circuito de futuro
A pesar de toda la precipitación demostrada (estuvieron completando el plantel de jugadores hasta el último momento y no concretaron sus derechos televisivos hasta ayer mismo), parece que el proyecto planteado por Greg Norman puede cuajar entre el público golfístico de todo el mundo. Para los que acuden en directo a los campos (después de esta cita inglesa vendrán cinco estadounidenses, una tailandesa y una árabe) se encontrarán con un horario más concentrado en cinco horas (las salidas al tiro permiten que todos los partidos acaben a la vez) y un ambiente más relajado que en los torneos convencionales. La música y las bebidas toman el protagonismo y el hecho de terminar en sábado también ayuda a que la gente se expanda un poco más. En resumen, que al margen del deporte se busca el espectáculo. Y luego, si gana un jugador conocido, pues mejor que mejor, como ha sucedido en Londres. Ayer a Charl le bastó con firmar dos sobre par para asegurarse la victoria (-7), pues Du Plessis no pudo alcanzarle y se quedó un golpe corto. Adrián Otaegui (-2), sexto, fue el mejor español.
Del resto de las figuras presentes, solo Dustin Johnson (-1) pudo quedar bajo par; a García (+6) y Phil Mickelson (+10) se les hizo demasiado dura esta primera cita de su nuevo circuito. Para la próxima de Portland en julio ya han confirmado otros ‘desertores’ del PGA como Bryson Dechambeau, Patrick Reed y Pat Perez.