Feijóo pide otros Presupuestos en plena división del Gobierno
► El líder del PP avisa que sería «dramático» no contar con nuevas cuentas en 2023 y reclama otro rumbo
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ahondó ayer en la división en el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos para apuntalar su oferta de alternativa a los españoles. El líder de la oposición, en la reunión de las direcciones de sus grupos parlamentarios del Congreso y del Senado, alertó de la «profundísima crisis económica» que se cierne sobre España e instó al Ejecutivo a actuar con celeridad. Primero, corrigiendo los Presupuestos Generales del Estado (PGE) vigentes; y segundo, poniéndose ya a trabajar en las cuentas de 2023 adecuándolas a la ralentización económica y al gasto en Defensa comprometido en el marco de la Cumbre de la OTAN celebrada en Madrid la semana pasada.
«Si los Presupuestos de 2022 ya no sirven, sería dramático que no aprobemos los de 2023», avisó Núñez Feijóo en la sala Constitucional de la Cámara Baja. Allí se habían dado cita las direcciones de los grupos populares del Congreso y del Senado para preparar el debate sobre el estado de la nación de la semana que viene; una convocatoria en la que el PP planteará su receta para ahuyentar lo mejor posible los nubarrones económicos.
El Gobierno, en los PGE de 2022, previó un crecimiento económico del siete por ciento del producto interior bruto (PIB) y ahora lo rebaja al cuatro por ciento; mientras situó la inflación en un 1,6 por ciento y en estos momentos está disparada por encima del diez por ciento. Estos dos datos, según Núñez Feijóo, dejan en papel mojado las cuentas, cuya actualización ve también necesaria para invertir «el incremento de la recaudación en 15.600 millones de euros» en devolver el «exceso de pago, especialmente en las rentas bajas y medias». Una de las propuestas de los populares, que también piden Vox y Ciudadanos (Cs), pasa por deflactar el IRPF para compensar a la clase media-baja la subida de precios.
Igual que Zapatero
«¿Qué más tiene que pasar para que el Gobierno se dedique a luchar contra los problemas de los españoles en vez de a luchar entre ellos y tratar de resistir a toda costa?», se preguntó el líder de los populares, antes de acusar a Pedro Sánchez de imitar la reacción de José Luis Rodríguez Zapatero en 2007, cuando negó la crisis financiera, y «mirar hacia otro lado» a pesar de las «evidencias».
Muy crítico y con un diagnóstico sumamente pesimista de la situación de España, Núñez Feijóo recordó que el PSOE y Unidas Podemos hablaron de «pobreza energética» cuando el precio de la luz subió unos puntos con el Gobierno de Mariano Rajoy, mientras ahora, con ellos en el Palacio de la Moncloa, la electricidad ha incrementado su valor «un 150 por ciento en un año». Aun así, lamentó el dirigente gallego, el Ejecutivo mantiene sus veintidós ministerios –el segundo Consejo de Ministros más numeroso de la democracia española– e incrementa sus asesores hasta una cifra récord que «supera los ochocientos».
Núñez Feijóo, además, hizo hincapié en la necesidad de cumplir los compromisos adoptados en la Cumbre de la OTAN, así como los adquiridos bilateralmente con Estados Unidos. Este capítulo, que implica un aumento del gasto militar, levanta ampollas en el Gobierno y ayer mismo provocó que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, pidiese al presidente Sánchez una reunión urgente para analizar su acuerdo de coalición. Unidas Podemos acusa al PSOE de incrementar el crédito a Defensa sin consultarle.
El jefe de filas del PP es consciente del enfrentamiento en el Gobierno y lo utiliza en su favor. Ayer, reivindicó ante los suyos que el PP ha demostrado más sentido de Estado y más voluntad de diálogo que PSOE y Unidas Podemos. «España puede seguir contando con el PP para buscar un cambio de rumbo y llegar a buen puerto».
Su discurso marcó el fondo y la forma que empleará Cuca Gamarra, su secretaria general, en el debate sobre el estado de la nación, en el que no podrá participar Núñez Feijóo al no ser diputado. Pero la economía, aunque centró el grueso de su intervención, no fue el único aspecto que sacó a colación el líder de los populares.
De nuevo dijo que Sánchez «rompió la baraja» de un posible pacto para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) con la proposición de ley del PSOE ‘ad hoc’ para que el órgano de gobierno de los jueces pueda hacer otra vez nombramientos en funciones, pero solo en el Tribunal Constitucional, órgano en el que el Gobierno tiene ahora cupo para nombrar vocales siempre que lo haga de forma paralela a los nombramientos que le corresponden al propio Constitucional. «Demuestra que lo único que le interesa es el control del Tribunal Constitucional», espetó Núñez Feijóo.
Fuentes del PP, tras la reunión, aseguraron que el partido tiene ya preparada una propuesta seria y trabajada para renovar el CGPJ y reformar el sistema de elección de sus vocales, en la línea con lo que reclaman la Unión Europea y los propios magistrados –que los jueces elijan al menos la mitad de los miembros del órgano de gobierno–.
Núñez Feijóo también arremetió contra la reacción del Gobierno al resultado de las elecciones andaluzas, en las que el PP consiguió la mayoría absoluta: «Más sanchismo». Así, censuró por un lado que se hayan «desprestigiado» las instituciones, con Indra, el Tribunal Constitucional y el Instituto Nacional de Estadística (INE) como ejemplos más recientes; y por otro, que el Ejecutivo haya redoblado «la guerra ideológica» pactando la Ley de Memoria Democrática «con aquellos que jalean el régimen del terror», dijo, en alusión a EH Bildu.
Los populares tienen en el cajón una reforma del CGPJ, pero exigen que antes el Gobierno retire su ley para «controlar» el TC