Nueva matanza de civiles en otro bombardeo ruso en la región de Donetsk
▶ Al menos 15 muertos y 24 desaparecidos tras el ataque a un edificio de viviendas
El ataque ruso se produjo en la madrugada del domingo contra la localidad de Chasiv Yar, población de unos 12.000 habitantes situada al sureste de Kramatorsk, muy cerca de Bajmut, en el área de la provincia de Donetsk todavía bajo control de Kiev. Los proyectiles impactaron contra un edificio de viviendas de cuatro plantas, que ha quedado casi totalmente derruido. La portavoz del Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania (GSChS), Verónica Bajal, adelantó al mediodía de ayer un balance provisional de 15 muertos. Se calcula que bajo los escombros hay atrapadas unas 24 personas, un niño de 9 años entre ellos. Algunas están con vida, ya que se ha podido establecer contacto verbal.
«Durante las operaciones de rescate, en el lugar del siniestro se encontraron 15 cadáveres y cinco personas pudieron ser extraídas con vida de entre los escombros. Se ha establecido y mantenido contacto verbal con tres personas sepultadas bajo los cascotes y se están tomando medidas para rescatarlos», declaró Bajal a los medios de comunicación ucranianos. La portavoz aseguró que en los trabajos de descombrado trabajan 67 empleados de los equipos de salvamento del GSChS.
El primero en informar del ataque fue el responsable de la Administración militar regional del Donetsk leal a Kiev, Pavlo Kirilenko, detallando que había sido alcanzado un edificio residencial, como viene sucediendo en las últimas semanas con bastante frecuencia. Kirilenko aseguró que «las dos entradas al edificio han quedado completamente destruidas». Según relató, los cohetes fueron disparados por las devastadoras lanzaderas múltiples ‘Uragán’. Ayer, el Ministerio de Defensa ruso no reaccionó a las denuncias de las autoridades ucranianas en relación con la masacre de Chasiv Yar, pero el sábado informó que habían destruido en esa localidad un hangar con obuses estadounidenses M777 de 155 mm.
Según Kirilenko, desde el comienzo de la guerra en el Donetsk bajo control de Kiev han perecido ya 591 civiles y casi 1.600 resultaron heridos. El gobernador ya avisó el viernes que, pese a la ‘pausa’ en la operación anunciada por Moscú, «se están preparando nuevas acciones». En efecto, tras la toma de toda la región de Lugansk por las tropas rusas y las fuerzas separatistas, a comienzos de mes, Rusia ha ralentizado la ofensiva terrestre, pero no los bombardeos, que no cesan y que, según el Estado Mayor ucraniano, están afectando a Sloviansk, Kramatorsk, Siversk, Bajmut y numerosas poblaciones del entorno, como ha sido el caso de Chasiv Yar.
El Ejército ucraniano señalaba ayer que el único avance terrestre de las tropas rusas tuvo lugar en Dolomitne, cerca de Bajmut. Los ataques con misiles y artillería están afectando no sólo a las poblaciones de Donbass que las fuerzas rusas tratan de conquistar, sino también a Mykolaiv, Krivói Rog y Járkov, cuyo gobernador, Oleg Sinegúbov, reportó ataques contra un centro educativo y una vivienda.
Pese a los numerosos testimonios de organizaciones humanitarias y de derechos humanos, las autoridades rusas continúan negando que los civiles estén siendo víctimas de los ataques del Ejército ruso. Contrariamente a estas evidencias, reconocidas incluso por la ONU, el Kremlin llama a tales informes «falsificaciones y provocaciones».
Los proyectiles se lanzaron contra la localidad de Chasiv Yar. Algunos de los sepultados bajo los escombros siguen con vida