CRÓNICAS PLENARIAS Empieza el reparto en la Cámara: despachos, dineros y senadores
► Vetos cruzados entre PSOE y Vox en la votación de los puestos de la Cámara Alta
El Parlamento andaluz empezó ayer a andar en una legislatura que tiene muchas incógnitas por resolver por la situación política actual. Se sentaba por primera vez el nuevo Gobierno monocolor del PP en los bancos azules que les corresponden mientras que en el PSOE se podían ver las caras de desolación por el mazazo que ha supuesto la condena del Supremo por el caso ERE. Están en una travesía del desierto. Desde Vox están ubicándose en un papel que no habían imaginado mientras que en Por Andalucía gestionan con dificultad su exiguo grupo que está, además, bastante dividido. Hay expectación por conocer cómo gestionará el PP andaluz la mayoría absoluta, si aplicando el rodillo o «con generosidad» como repiten los portavoces populares.
Por el momento, todo son negociaciones sobre lo más prosaico de la política: los espacios en el Parlamento y las asignaciones de los grupos parlamentarios para su funcionamiento. Aunque también para los nombramientos. La Cámara andaluza eligió ayer a los nueve senadores que representarán a Andalucía en esta XII Legislatura. Y hubo cortesía parlamentaria... aunque la justa. Cuatro de los cinco senadores que designa el PP por su resultado electoral del 19-J (Elías Bendodo, Juan Bravo, Teresa Ruiz-Sillero y María José García-Pelayo) lograron 106 votos de los 107 emitidos, excepto Javier Arenas a quienes los cinco diputados de Por Andalucía le negaron su apoyo ya que «está en los papeles de Bárcenas por lo que le pedimos que dimitiera la legislatura pasada», según explicó la portavoz Inma Nieto.
Los senadores del PSOE (Susana Díaz, Juan Espadas y Víctor González) no obtuvieron los votos de Vox y la de Vox (María José Rodríguez de Millán) no logró ni los del PSOE ni los de Por Andalucía. Ambos partidos consideraron una contradicción que una formación «que quiere terminar con las comunidades autónomas» esté representado en la cámara territorial.
Por cierto que la expresidenta Susana Díaz fue la única senadora que no estuvo presente en la Cámara durante la votación a pesar de que sí estaba en el Parlamento ya que tuvo que pasar por la comisión de idoneidad para poder ser elegida. Teresa Rodríguez, la lider de Adelante Andalucía, no asistió al pleno mientras que su compañera Maribel Mora optó por la abstención ya que su formación no tiene derecho a ningún senador autonómico por los resultados electorales.
Sin acuerdo
Al margen de los senadores y de los miembros de la Diputación Permanente, los grupos parlamentarios no fueron capaces de llegar a más acuerdos aunque hoy retomarán las negociaciones. Una de las claves es el reparto de los fondos para el funcionamiento de los grupos parlamentarios. En la anterior legislatura, el PSOE recibió 3.233.872 euros anuales; el PP 2.547.899 euros; Ciudadanos, 2.057.919 euros; Unidas Podemos, 1.665.933 euros; y Vox, 1.175.953 euros al año.
Unas cantidades que se calcularon en función del número de diputados y con unos criterios que ahora se ponen en solfa sobre todo porque la mayoría absoluta del PP le posibilitaría recibir mucho más dinero, mientras que los cinco diputados de Por Andalucía tendrían dificultades de funcionamiento.
De hecho, en varios grupos políticos ha habido despidos. Ciudadanos fue el primer grupo que despidió a su personal mientras que en Podemos y en el PSOE también han hecho lo propio por falta de recursos para pagarles. Hay una propuesta sobre la mesa que considera que todos los grupos deberían tener, al menos, un administrativo, un jurídico y un periodista para poder trabajar. La distribución de espacios en el Parlamento es otro caballo de batalla. Los grupos se reparten los despachos de trabajo en función de los resultados electorales pero hay que llevar a cabo un auténtico puzzle para que todos encajen.
El último asunto abierto es el de las comisiones. Habrá 20 en esta legislatura y todos los diputados deben pertenecer a una de ellas puesto que es el lugar cotidiano de trabajo. El PP quiere presidir once de ellas, mientras que 5 serían para el PP, tres para Vox y 1 para Por Andalucía.
Los grupos no se ponen de acuerdo en el reparto de los fondos para su funcionamiento; tampoco en los espacios de trabajo
Bendodo, Bravo, Arenas, Ruiz-Sillero, García-Pelayo, Espadas, Susana Díaz, González y Rodríguez de Millán, nuevos senadores