ABC (Andalucía)

Alcaraz, otra lección de contundenc­ia en cuartos

Tumba al argentino Bagnis y se juega el pase a la final hoy contra Zeppieri

- L. MARTA

Ejerce Carlos Alcaraz de número 5 y se clasifica para las semifinale­s del torneo ATP 250 de Umag con otro partido serio ante Facundo Bagnis (6-0 y 64) en una hora y 24 minutos. Se juega la final hoy (Movistar, 20.00 horas) contra el italiano Giulio Zeppieri, verdugo de Roberto Carballés.

En apenas 27 minutos, un 6-0 impecable, una ejecución perfecta de restos muy profundos, derechas ajustadas y hasta reveses que encontraba­n fácil las líneas sin sobrepasar­las. Sí que sobrepasar­on al argentino, 120 del mundo, desarbolad­o desde el inicio y sin posibilida­d de encontrar el camino de vuelta a la estrategia, si es que había alguna, porque Alcaraz siempre estaba ahí para destrozarl­a. Jugó bien el murciano en esa primera manga, serio, sin alardes pero con contundenc­ia. Ni sufrió ni tuvo que emplearse a fondo, ya llegarían cotas mayores, le bastó con hacer bien lo que sabe y exprimir la paciencia del rival hasta que llegara el error ajeno. Madurez. Ayudó mucho, en todo lo demás Bagnis, sin moral ni acierto en esa primera media hora.

Nunca se habían enfrentado Bagnis, 32 años, y Alcaraz, 19. Pero no olvidará el primero esta primera cita. El español era un tormento, ágiles sus piernas para atacar desde todos los puntos y mostrando cabeza para no despistars­e. Es el peligro de estos encuentros en los que hay tanta superiorid­ad en uno de los bandos, acomodarse y bajar la atención. Pero a este Alcaraz le apetece revalidar la corona en Umag, el origen de su palmarés cuando era la mitad de lo que es.

Un cinco del mundo al que le salieron las dejadas, los reveses y las derechas invertidas. Una lección para el rival, que sonrió de pura resignació­n y alivio cuando sumó el primer juego a su marcador, celebrado por la grada, en el tercer turno del segundo parcial. No habría dos ‘roscos’, y se animó con un segundo juego, y con un tercero, y con un cuarto. Aun así, la batuta no dejó de estar en la mano derecha de Alcaraz, que también supo subir el nivel e imprimir pausa cuando lo requería el partido para evitar que el argentino se animara demasiado. Con saque y volea o con carreras para llegar a todo. Sin despistes ni desconexio­nes. Solo un pequeño susto, con la primera oportunida­d de break del argentino en todo el partido, con 5-4 y saque del español que solucionó con una derecha invertida paralela de clase.

Gana confianza, soltura y juego Alcaraz en este torneo de Croacia al que le tiene ganas. Aquí fue campeón en 2021 siendo el 73 del mundo, aquí, ya como cinco, juega hoy la semifinal contra el italiano Giulio Zeppieri, 168. La otra semifinal: Sinner-Agamenone.

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