Estrellas en busca de vestuario
▶ En el mercado figuran agentes libres de gran potencial que siguen sin encontrar club para esta temporada
A falta de 24 días para el cierre del mercado y con varias ligas europeas ya inauguradas, sorprende echar un vistazo a la extensa y talentosa lista de jugadores que son agentes libres y aún no han logrado encontrar un equipo donde continuar sus carreras. Síntoma inequívoco de que, incluso en el fútbol de élite, un nombre y un pasado no te aseguran un puesto en un equipo. Seguramente acabarán encontrando un club que apueste por ellos, pero, de momento, top mundiales como Isco, Marcelo o Cavani, entre otros, siguen entrenándose en solitario a la espera de enfundarse la camiseta que vestirán la temporada 2022-23 que ya ha echado a andar.
El caso de los dos exmadridistas quizás sea el más llamativo. Cierto es que sus dos últimos años en el club han sido testimoniales en cuanto a lo futbolístico. Apariciones a cuentagotas y, casi siempre, en partido de talla menor. El lateral brasileño, a sus 34 años, desea quedarse en España y, a ser posible, en Madrid o lo más cerca de la capital de España. Su familia está encantada de vivir aquí, y el hijo mayor es una de las promesas de la fábrica blanca, pero va a ser complicado que pueda ver cumplido su deseo. Ha sonado para el Galatasaray, el Milán o el Valladolid de Ronaldo, pero de momento no hay nada concreto. La opción de regresar a Brasil sería la más fácil, pero también la más incómoda para su familia y su hijo.
Idéntico caso es el de Isco, aunque con un matiz importante. El malacitano tiene 30 años, por lo que en teoría le queda más tiempo de fútbol que a Marcelo. En el Real Madrid ganaba ocho millones de euros netos, soldada muy complicada de igualar fuera de Valdebebas, teniendo en cuenta su pobre rendimiento desde 2019. El Sevilla de Lopetegui, que le conoce bien de su etapa en la selección y de su corto tránsito en el banquillo del Bernabéu, aparece como un destino posible para Isco, pero aún sigue sin cerrar su contratación.
Cavani, un killer sin club
El oficio de goleador tiende a apostar por los prometedores jóvenes que vienen en camino, como Haaland o Sesko, pero no se entiende que un matador como Cavani no tenga hueco en ninguna plantilla. A sus 35 años, el charrúa aún asegura alrededor de 15 goles por temporada. El United no le ha renovado y el Villarreal anda tras él. Veremos qué sucede finalmente con el bueno de Edison, por el que también se interesa el Boca Juniors argentino.
La misma edad tiene Mertens, uno de los grandes futbolistas de la historia del Nápoles, equipo al que ha dicho adiós tras nueve temporadas. El belga tiene cartel y talento aún por derrochar, y sus aspiraciones económicas no deberían ser un problema. Le gustaría seguir compitiendo en Europa, a ser posible jugando la Champions. El Galatasaray ha preguntado por él, pero nada más de momento.
Dos delanteros jugosos como Belotti y Diego Costa podrían firmar próximamente, aunque todavía no lo han hecho. El ariete italiano, que acumula cien goles en la Serie A y solo tiene 29 años, está cerca de firmar con la Roma de Mourinho, que se está reforzando bastante bien. El nueve hispano-brasileño, por su parte, podría regresa a la Liga, y también al Rayo, donde explotó hace una década. Formaría con Falcao una dupla bastante interesante, como ya lo hicieron en el Atlético. Januzaj es otro caso de expediente X. Solo tiene 27 años, no renovó con la Real Sociedad y sigue sin equipo. Un futbolista tan joven y tan bueno es incomprensible que esté sin equipo. Como le ocurre a Cheryshev, que, tras ir combinando Villarreal y Valencia, este verano está sin camiseta y no hay ni siquiera rumores de algún posible interesado. Un extremo zurdo que aporta valor, pero por el que no se ha confiado en él en este mercado.
Entre los futbolistas españoles sin equipo hay también nombres tan conocidos como los de Mata, Tello, Nolito y Monreal. Y en el panorama internacional, jugadores con caché como Aurier, Sidibé, Dzyuba, Ben Arfa, Caicedo, Drinkwater y Musacchio. Nombres, todos ellos, con argumentos suficientes para no estar sin equipo, pero el fútbol, como el resto de sectores, también paga las consecuencias de la inquietante situación económica mundial que vivimos.
Isco ganaba en el Real Madrid ocho millones netos, una ficha difícil de igualar fuera del equipo de Valdebebas