Israel y la Yihad alcanzan una tregua tras tres días de ataques
▶ Al menos 41 palestinos han muerto desde el comienzo de la escalada de violencia
Israel y la Yihad Islámica acordaron ayer una tregua en la que ha participado como mediador Egipto. El alto el fuego estaba previsto que entrara en vigor a las ocho de la tarde de ayer, hora que no respetó el grupo terrorista, que intensificó los ataques, por lo que la tregua fue fijada para las once y media de la noche. Este alto el fuego aumenta las esperanzas de que se ponga fin al estallido más grave que ha tenido lugar en la franja de Gaza en más de un año.
Ayer, la Yihad Islámica amplió el alcance de sus ataques para disparar hacia Jerusalén en lo que describió como una represalia por el asesinato durante la noche de su comandante del sur de Gaza, Jaled Mansur, el segundo oficial de alto rango que ha perdido en los combates, informa Reuters.
Las fuerzas israelíes, por su parte, bombardearon objetivos palestinos durante el fin de semana, provocando ataques con cohetes de mayor alcance contra sus ciudades.
Estos enfrentamientos han recordado los preludios de anteriores conflictos en Gaza, aunque este último ha sido relativamente contenido ya que Hamás, el grupo islamista que gobierna la Franja y una fuerza más poderosa que la Yihad Islámica, respaldada por Irán, se ha mantenido al margen.
Israel lanzó el viernes lo que denominó ataques preventivos contra lo que preveía que sería un ataque de la Yihad Islámica como consecuencia de la detención de un dirigente del grupo, Bassam al Saadi, en la Cisjordania ocupada. En respuesta, la Yihad Islámica disparó cientos de cohetes contra Israel. El grupo terrorista puso como condición para aceptar la tregua la liberación de Al Saadi, así como poner fin a los bombardeos.
Durante esta escalada de violencia tres israelíes, entre ellos dos militares, han resultado heridos por los más de 900 cohetes lanzados por la organización terrorista, la mayor parte de los cuales han sido interceptados por el sistema defensivo Cúpula de Hierro; mientras que funcionarios de la Franja de Gaza informaron de que 41 palestinos, casi la mitad de ellos civiles –entre los que se incluían niños–, habían muerto durante estos tres días.