Suspenden los trabajos de rescate de los diez mineros atrapados en un pozo en México
A los más de cien muertos registrados desde 2006 en la zona minera especializada en la extracción de carbón en el estado de Coahuila habrá que sumar los diez trabajadores sepultados en un pozo en la zona de El Pinabete. El operativo de rescate se dio por concluido debido a la falta de seguridad para que rescatistas profesionales accedieran a los pozos inundados en los que se encuentran los desaparecidos. Han transcurrido nueve días desde que colapsara la mina de Sabinas. El problema fue el río homónimo que la circunda, unido a los trabajos en una cavidad anexa repleta de agua que acabó colapsando. Los diez jornaleros que picaban en esta mina abandonada hace 40 años acabaron sepultados, mientras que otros cinco consiguieron salir a tiempo.
La esperanza de los familiares residía en que se hubieran resguardado en una burbuja de aire entre las estrechas cavidades, alentados por historias similares de supervivientes. Finalmente, el Equipo de Respuesta Inmediata del Ejército mexicano dio por terminada la misión «al no ofrecer las condiciones necesarias de seguridad» para los buzos protagonistas del rescate. Intentaron acceder al pozo 4, de 60 metros de profundidad, mediante una jaula de metal. El pasado miércoles incluso llegaron a confirmar la retirada de los pivotes que obstaculizaban el acceso a dicha cavidad y un buzo de la Secretaría de la Defensa Nacional accedió a una exploración inicial.
López Obrador, abucheado
Los mineros afectados carecen de agua y comida, mientras sus familiares esperan en el exterior con temperaturas de 40 grados, carentes de un acceso digno al aseo y apartados de la zona de rescate. Debido a la información opaca y a cuentagotas que se les ofrece, abuchearon al presidente López Obrador cuando visitó el lugar y le acusaron de jugar con su dolor para conseguir la fotografía. Muchos continúan a la espera de noticias y se niegan abandonar la zona sin recuperar a sus allegados. De poco han servido los 600 efectivos (agentes del Ejército, bomberos y rescatistas) que han tratado de encontrar a los mineros atrapados. Veinticinco bombas extractoras, siete perforadoras, dos drones submarinos, 37 vehículos de bomberos y cinco ambulancias completaban una misión suspendida por la imposibilidad de un rescate que ha mantenido en vilo a México.