Una veintena de heridos al saltar de un tren parado por un incendio en Castellón
► La maquinista pidió que nadie se apeara del convoy, pero cundió el pánico
Una veintena de viajeros de un tren sufrieron ayer heridas y quemaduras de diversa consideración al apearse junto al incendio forestal de Bejís (Castellón), cuando el convoy estaba detenido precisamente debido al fuego, con el tráfico ferroviario interrumpido para evitar el peligro.
Al cierre de esta edición, fuentes de la Conselleria de Sanidad confirmaron que había tres viajeros atendidos con pronóstico grave por quemaduras. De ellos, uno fue trasladado en helicóptero al Hospital de La Fe; y los otros al Clínico y a Sagunto. Además, al menos una decena más de pasajeros resultaron heridos leves y fueron trasladados al hospital de campaña habilitado en Jérica.
Al parecer, la proximidad de las llamas ha alertado a los pasajeros de este tren que cubría el trayecto entre Valencia y Zaragoza, y algunos de ellos han bajado para huir, lo que en realidad ha aumentado el peligro para su integridad.
El convoy detuvo su marcha para regresar a Caudiel ante la proximidad del incendio de Bejís. Según informó Renfe, cuando el tren detuvo la marcha por la proximidad del fuego, entre el momento de la parada y el retroceso, algunos viajeros, asustados, decidieron dejar el convoy y salieron de sus vagones, para volver a entrar al ver la proximidad de las llamas. Las mismas fuentes aseguraron que algunos rompieron incluso las ventanas para salir.
A salvo a bordo
La maquinista pidió a los viajeros que no bajaran del tren y se cambió con rapidez a la cabina trasera para hacer el retroceso a Caudiel, lo que evitó que se registraran más daños personales, ya que los pasajeros que permanecieron en el interior no han resultado heridos.
La circulación ferroviaria quedó suspendida y se habilitó el transporte por carretera para los viajeros. Renfe informó en redes sociales de la maniobra de este tren y de su colaboración con Protección Civil para atender a los afectados. No aclaró, de momento, la razón por la que el tren había llegado tan cerca de las llamas y no se le cerró el paso antes.
Este episodio de incendios sucesivos al sur y al norte de la Comunidad Valenciana entró así en una nueva etapa más dramática –aparte de los terribles efectos devastadores en la naturaleza, con la imagen de personas caminando por las vías del tren huyendo del fuego.
A última hora de este fatídico martes en la evolución del incendio, se solicitó a Cruz Roja de Castellón la apertura de un segundo albergue en el pabellón multiusos de Segorbe para acoger a 68 personas procedentes de un campamento, algunas con movilidad reducida
El fuego arrasó hasta ayer un millar de hectáreas y continuaba avanzando sin control, ante las complicaciones provocadas por el viento.
Dos bomberos heridos
Este incendio declarado a media tarde de este lunes obligó también a evacuar de forma preventiva los municipios de Teresa, Torás y el propio Bejís. En total, más de 1.000 personas han sido ya desalojadas y dos bomberos resultaron ayer heridos durante los trabajos de extinción.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, calificó desde el Puesto de Mando Avanzado la situación de «extraordinaria, complicada y muy difícil», se mostró «muy preocupado» por la evolución del fuego y subrayó que la premisa fundamental es «preservar las personas».
También explicó que ayer por la mañana la situación «estaba definida y la estrategia estaba funcionando», pero se ha producido un «cambio disruptivo» a causa del viento durante la tarde.