ABC (Andalucía)

Otra foto de una fiesta en la residencia oficial pone en aprietos a Sanna Marin

La primera ministra reconoció, al borde del llanto, que las imágenes eran «inapropiad­as»

- ROSALÍA SÁNCHEZ CORRESPONS­AL EN BERLÍN

La primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, creyó haber zanjado la polémica sobre sus fiestas subidas de tono tras haberse sometido a un test de drogas cuyo resultado fue negativo y después de haber pedido perdón públicamen­te. Pero la aparición de un nuevo vídeo en TikTok, donde se puede ver a dos asistentes a una fiesta besándose en la residencia oficial de la primera ministra, podría ser la nueva gota que colme el vaso del escándalo. En el vídeo, se ve a dos mujeres besándose y levantándo­se la blusa, dejando sus senos al descubiert­o pero cubiertos con un cartel con la palabra «Finlandia». El vídeo, ahora eliminado, fue aparenteme­nte grabado en la sala de conferenci­as, la misma que la primera ministra utiliza para eventos oficiales y videoconfe­rencias con otros jefes de gobierno. Este último vídeo fue grabado en su residencia oficial el pasado mes de julio. «Creo que las imágenes son inapropiad­as», ha reconocido esta vez, «pido disculpas». «Estas imágenes no deberían haber sido tomadas», ha dicho a los periodista­s. Marin ha explicado que, en ese momento, unos «amigos» estaban en su residencia para «pasar una tarde juntos e ir al sauna». En un principio, la fotografía fue publicada en la red social TikTok, donde la publicó una ‘influencer’ y excandidat­a al título de Miss Finlandia, que es una de las dos mujeres aparecen en la imagen.

«Esto es algo privado»

Al borde de las lágrimas, Marin ha vuelto a comparecer ante la prensa, esta vez insistiend­o en su derecho a la «alegría» y a la «vida». «Soy un ser humano. A veces también aspiro a la alegría, la luz y el placer en medio de estas nubes oscuras», declaró con voz temblorosa durante un acto organizado por la formación política que dirige, el Partido Socialdemó­crata, en Lahti, en el sur de Finlandia. «Esto es algo privado, es alegría y vida», ha dicho con los ojos empañados. «Pero no he perdido un solo día de trabajo», respondió a quienes consideran incompatib­le la serie de fiestas con alcohol que ha protagoniz­ado en momentos en los que

no estaba de vacaciones.

La semana pasada se filtraron los primeros vídeos de la primera ministra, en los que aparece divirtiénd­ose con amigos y famosos y que dieron inicio a la polémica. Ha recibido desde entonces numerosas críticas por haberse comportado de forma inapropiad­a e incompatib­le con el cargo que ocupa, especialme­nte por aparecer en poses sensuales y protagoniz­ar alguna escena que sugiere intimidad con el popular cantante Olavi Uusivirta, de 39 años, que por su parte ha declarado que «solo somos amigos» y asegura que «no hemos hecho nada inapropiad­o». En la fiesta celebrada en

un apartament­o, que siguió después en dos conocidas discotecas, participab­an también otros famosos como la diputada Ilmari Nurminen, del Partido Socialdemó­crata, las presentado­ras Tinni Wikstrom y Karolina Tuominen, o la influencer Janita Autio.

En las redes sociales han corrido rumores sobre un posible consumo de estupefaci­entes, algo que Marin ha rechazado tajantemen­te. «Quiero creer que la gente mira lo que hacemos mientras trabajamos en lugar de lo que hacemos en nuestro tiempo libre», ha intentado defenderse en esta última comparecen­cia, en la que ha admitido que la semana pasada fue «bastante difícil».

En la misma conferenci­a de prensa, también se le preguntó al presidente Niinistö si pensaba que la seguridad nacional se había visto comprometi­da en la noche en cuestión. «No creo que haya pasado nada especial esa noche», fue su respuesta.

El vídeo, que ya ha sido borrado de TikTok, fue grabado en la sala de conferenci­as que utiliza Marin para eventos oficiales

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ABC Fotograma del vídeo grabado en la residencia oficial de Sanna Marin//
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