Feijóo denuncia los «tics autoritarios» de un Sánchez «bronco y faltón»
Abascal lamenta que no se hablase de la explotación de hidrocarburos
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, está convencido de que Pedro Sánchez está arrepentido del debate que les enfrentó el martes en el Senado. En una entrevista en Antena 3, el líder del PP confesó ayer que en la Cámara Alta se sintió como si fuera él el presidente del Gobierno ante un Sánchez «faltón», que actuó como jefe de la oposición y que dejó ver «tics autoritarios». En Génova están seguros de que la «virulencia» con que Sánchez atacó a Feijóo no solo demuestra su «debilidad», sino que además les deja libre el espacio de centro.
«Quedó claro que el presidente del Gobierno se convirtió en jefe de la oposición, fue bastante bronco y nervioso. Recibí el ataque más furibundo de un presidente», comentó Feijóo, a quien le llamó la atención sobre todo que Sánchez hablase de Galicia y criticase su gestión, cuando el PSOE fue el último partido parlamentario en las pasadas elecciones autonómicas.
Como siempre, la percepción va por barrios. Y es que la portavoz del Gobierno, la socialista Isabel Rodríguez, vio ayer al PP «sin ninguna propuesta» ante «problemas de tanta envergadura», según expresó en una radio asturiana, RTPA, y recogió la agencia Servimedia.
El líder de Vox, Santiago Abascal, también habló sobre el debate en el Senado, en el que no pudo participar por ser diputado, pero evitó hacer victimismo por el hecho de que Sánchez compareciese en la Cámara Alta en vez de en el Congreso, como es habitual. Frente al Tribunal Constitucional, después de presentar un recurso contra el ‘veto’ al español en las aulas catalanas, defendió el papel de su senadora Pepa R. de Millán –que debutó con un cara a cara contra el presidente–, cuya intervención tildó de «excepcional». «Representa a la perfección nuestra postura», zanjó Abascal, sin polemizar.
Lo que sí lamentó es que, según él, ni Sánchez ni Núñez Feijóo se detuvieron a hablar «del problema principal». Y este, para Vox, no es otro que la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica, que prohíbe explorar y explotar nuevos hidrocarburos en España. El martes Vox registró una proposición de ley para revertir esa limitación.
Cs: «Regreso al pasado»
Desde Barcelona, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, sí criticó que el debate se llevase al Senado y lo catalogó como «un regreso al pasado». «Podría haber sido un debate de 2008 o de 1998; es el viejo PP y el viejo PSOE», sentenció.