La exigencia del euskera deja el País Vasco sin profesores de Religión Islámica
▶ En toda la comunidad solo hay cuatro docentes que cumplen los requisitos
Según el último informe sobre Escolarización de Alumnos de Origen Extranjero en el País Vasco, el 15,7% de los alumnos del sistema educativo son de origen extranjero, un porcentaje que no ha dejado de crecer en los últimos años. Este hecho se está traduciendo en un incremento de las solicitudes para cursar Religión Islámica en los centros educativos. En algunos casos estas peticiones se cuentan por decenas, lo que ha puesto de manifiesto la falta de profesorado habilitado en el País Vasco para impartirla.
En concreto, desde la Federación Islámica del País Vasco aseguran que en estos momentos solo hay cuatro docentes reconocidos para poder impartirla. Y eso que la bolsa de trabajo para ser profesor de esta materia en la red pública, al igual que ocurre con otras disciplinas donde hay necesidad de profesores, está siempre abierta.
El problema es que no es fácil encontrar perfiles que cumplan con los requisitos exigidos. En el caso de las etapas de Infantil y Primaria, los docentes tienen que haber cursado el grado en Magisterio, y en Secundaria, el máster en formación del profesorado. Además, todos ellos tienen que haber superado el curso de especialización que imparte la Comisión Islámica de España y acreditar que tienen el nivel de euskera requerido.
Es ahí, en la necesidad de acreditar un título de euskera donde se forma el cuello de botella. «El problema es el euskera», resume Aziz Messaoudi Rhamssoussi, presidente de la Federación Islámica del País Vasco. En su opinión es esa exigencia idiomática y nada más lo que está dificultando que profesores acreditados puedan apuntarse en las listas. Se trata, además, de una materia que se imparte en castellano, pero en la que los docentes están «igualmente obligados a tener el nivel de euskera», que sería el equivalente al C1. «Hay mucha gente con la titulación necesaria que no puede acceder», lamenta.
Desde la Federación recuerdan que acceder a las clases de Religión Islámica es un derecho del alumnado. Aseguran que precisamente por eso todos los años «animan» a las familias a que lo soliciten ya que es una de las opciones que aparece en los impresos para regularizar la matrícula en las escuelas e institutos.
De momento los centros educativos se están limitando a trasladar esas solicitudes al departamento de Educación, aunque la solución no parece ni sencilla, ni rápida. Entre tanto desde la Federación Islámica vasca denuncian la indefensión en la que se encuentran estas familias. Han solicitado varias veces a Educación que se cumpla este derecho si éxito. «Te dicen que sí, pero luego no cumplen», lamenta Messaoudi. Entre tanto, los menores musulmanes no tienen más remedio que «conformarse» con la asignatura de valores cívicos cuando no existe un profesor que pueda impartir la materia.
«Falta voluntad política»
La situación es similar en el resto de comunidades autónomas con lengua cooficial, según ha explicado a ABC Ihab Fahmy, responsable del área de Educación de la Comisión Islámica de España (CIE), la entidad encargada de asignar los profesores según las necesidades de los colegios y de otorgarles la capacitación. «En Valencia hemos llegado a un acuerdo para que los profesores que no cumplan el requisito lingüístico tengan dos años para sacarse el C1 de valenciano», explica Fahmy, quien valora que en el País Vasco «falta voluntad política» para alcanzar una solución similar.
Desde CIE estiman que este curso habrá 118 profesores de Religión Islámica que cumplen los requisitos , distribuidos en 13 comunidades y las dos ciudades autónomas.