Kiev acusa a Moscú de atacar otra central nuclear ucraniana
▶ La ofensiva no causó víctimas ni fueron dañados los tres reactores de la planta
La compañía ucraniana de energía nuclear Energoatom acusó ayer a las fuerzas rusas de atacar la zona industrial de la Central Atómica de Pivdennoukrainsk, situada en la región de Mykolaiv, al sur de Ucrania. El bombardeo, según reportó Energoatom, tuvo lugar en la noche del domingo al lunes. «En la madrugada del 19 de septiembre, las tropas rusas lanzaron ataques con misiles contra la planta de energía nuclear de Pivdennoukrainsk. Uno de los misiles cayó a 300 metros de los reactores nucleares», denuncia la empresa en un comunicado. «El edificio de la planta de energía nuclear resultó dañado por la onda expansiva, se rompieron los cristales de más de 100 ventanas. También quedaron cortadas tres líneas eléctricas de alto voltaje», asegura la nota, subrayando además que «se desconectó uno de los generadores de la Central Hidroeléctrica de Oleksandrivska», que forma parte de todo el complejo energético de Pivdennoukrainsk.
No obstante, las mismas informaciones aseguran que los tres reactores de la planta funcionan normalmente, las explosiones no acarrearon víctimas entre el personal y los niveles de radiactividad se encuentran dentro de lo admisible. Pivdennoukrainsk es la segunda central atómica más grande del país después de la de Zaporiyia.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, denunció ayer lo sucedido y publicó en su canal de Telegram un vídeo de una cámara de seguridad. «Área de Nikolaévkskaya. Por la noche, un cohete cayó a 300 metros de la Central Nuclear del Sur de Ucrania. Hubo un breve corte de energía. Las ventanas de los edificios en el territorio de la planta resultaron dañadas. Los invasores querían volver a disparar, pero olvidaron lo que es una central nuclear y el peligro que comporta. Rusia pone en peligro al mundo entero. Debemos detenerla antes de que sea demasiado tarde», escribió Zelenski en Telegram.
Tercera planta atacada
Pivdennoukrainsk es ya la tercera central nuclear ucraniana que padece los efectos de la guerra. La primera fue la tristemente famosa planta de Chernóbil, que fue tomada por el Ejército ruso en los primeros días de la invasión. Más adelante, sus instalaciones fueron abandonadas tras la orden de Moscú de replegar las tropas hacia Donbass.
A principios de marzo, los soldados rusos se hicieron también con la planta atómica de Zaporiyia, en donde permanecen todavía. El 1 de septiembre, llegó a esta central un grupo de inspectores del Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) para realizar comprobaciones. Tras elaborar un informe, los países miembros de la OIEA emitieron una declaración conjunta pidiendo a Rusia que saque sus tropas y personal de la planta de Zaporiyia, solicitud rechazada por Moscú. Debido a los bombardeos constantes, de los que las tropas rusas y ucranianas se acusan mutuamente, la central de Zaporiyia tuvo que ser desactivada. Volvió a estar operativa este pasado sábado al ser conectada a la red eléctrica ucraniana.