Miles de simpatizantes del partido ultra AfD piden en Berlín el fin de las sanciones a Rusia
La Policía creía que
unos 1.400 desplegados en puntos estratégicos desde los que intentaron bloquear la marcha. A 14 de los detenidos se les abrió expediente de denuncia por delitos de daños o por el uso de símbolos de organizaciones anticonstitucionales, a la espera de que la Policía ofreciera a lo largo del día de ayer datos definitivos de detenciones y denuncias. A la cabeza de la manifestación desfilaron la europarlamentaria Beatriz von Storch y el líder local de AfD, Dennis Hohloch.
El pasado fin de semana, en el marco de las celebraciones de la fiesta nacional de la reunificación alemana, ya se produjeron manifestaciones como esta en los Bundesländer orientales, donde AfD tiene más respaldo. Unas 10.000 personas salieron a las calles de Gera, en Turingia, para protestar por los altos precios de la energía y para pedir el fin de las sanciones contra Rusia.
La dirección regional de AfD en Turingia permanece bajo vigilancia de los servicios de Inteligencia alemanes por rozar la inconstitucionalidad.
Pero que el partido consiga reunir a ese mismo número de personas en Berlín sí es una novedad. «Ni nosotros ni la Policía contaba con una manifestación tan grande», reconocía anoche el director gerente de ‘Aufstehen Rassismus’, Irmgard Wurdak. Los manifestantes llegaron en autobuses y se concentraron delante del Reichstag, la sede del Bundestag, con banderas alemanas y rusas, coreando consignas contra la inflación y la escasez de energía, para terminar cuadrándose ante el himno nacional alemán. Marc Jongen, considerado filósofo del partido, acusó a Los Verdes de «clique sin patria que sacrifica Alemania en aras de las metas geoestratégicas estadounidenses» y culpaba al Gobierno de estar destruyendo la economía alemana. «El precio del gas volverá a la normalidad si volvemos a comprar gas barato de Rusia», levantaba aplausos el copresiente de AfD Tino Chrupalla.